Open-access Obesidad y sobrepeso en la población estudiantil costarricense entre los 8 y 17 años

Resúmenes

La obesidad durante la niñez y la adolescencia está aumentando en todo el mundo. Esta condición está asociada con diversos factores de riesgo para enfermedades crónicas. Sin embargo, la prevalencia de sobrepeso y obesidad en esta población ha sido difícil de cuantificar debido a que existe una gran variedad de definiciones. El propósito de este estudio fue determinar la prevalencia de sobre peso y obesidad de la población estudiantil costarricense entre los 8 y 17 años. Se seleccionó en forma aleatoria una muestra representativa de 9 900 estudiantes de escuelas y colegios costarricenses. Para definir sobrepeso y obesidad se utilizaron los puntos de corte del índice de masa corporal (IMC) recomendados por laOrganización Mundial de la Salud y la "International Obesity Task Force". También se utilizó el pliegue del tríceps como criterio para estimar la adiposidad. Se encontró que las mujeres presentaron mayor IMC y adiposidad que los hombres en todas las edades analizadas. Estos aumentaron con la edad, especialmente en las mujeres a partir de los 12 años. La prevalencia total para hombres y mujeres en los diferentes grupos de edad fueron: 14,9 a 23,3% (Sobrepeso 8 -11 años), 4,8 a 9,9%. (Obesidad 8 -11 años), 14,9 a 21,6% (Sobrepeso 12-17 años) y 2,2 a 9,8% (Obesidad 12-17 años). Estos porcentajes fueron mayores en las mujeres que en los hombres al calcularlos con base en los criterios internacionales. La prevalencia de obesidad fue más elevada cuando se utilizó el pliegue del tríceps para estimarla. En conclusión, la prevalencia de sobrepeso de estudiantes costarricenses oscila de un 15 a un 23% y de obesidad de un 2,2 a un 9,8%.Esta varía dependiendo de la edad, el sexo y del criterio utilizado para definirla.

sobrepeso; obesidad; prevalencia; niños; adolescentes


Child and adolescent obesity is increasing worldwide. It has been shown that this condition is closely related to several risk factors for chronic diseases. However, the prevalence of overweight and obesity in these populations has been difficult to quantify due to the wide variety of definitions used. The aim of this study was to determine the prevalence of overweight and obesity in Costa Rican students aged 8-17 years. A national-representative sample of 9990 subjects was randomly selected from Costa Rican elementary and high-school institutions. In order to define overweight and obesity, the sex-and age specific body mass index (BMI) cutoffs recommended by the World Heath Organization (WHO) and by the International Obesity TaskForce (IOTF) were selected. The triceps skinfold thickness was also used as a criteria for adiposity. Females had higher IMC and adiposity than boys at all ages, and both parameters increased with age, especially in female students starting at 12 years of age. The global prevalence rates for males and females in the different age groups were 14.9 to 23.3% (overweight 8 -11 yrs.), 4.8 to 9.9%. (Obese 8-11 yrs.), 14.9 to 21.6%  (Overweight 12-17 yrs.), 2.2 to 9.8% (Obese 12-17 yrs.). These rates tended to be higher in girls than in boys and also were higher when the IOTF cutoffs were used in comparison with the WHO criteria. The highest prevalence rate for obesity in this Costa Rican sample was achieved when the 90th percentile of the triceps skinfold thickness was used as the criteria. In summary, the prevalence of overweight in Costa Rican students was between 15 to 23% and the prevalence of obesity between 2.2 to 9.8%. These rates change according to age, sex, and when different criteria to define overweight and obesity are used.

overweight; obesity; prevalence; children; adolescents


Obesidad y sobrepeso en la población estudiantil costarricense entre los 8 y 17 años
Aileen Fernández-Ramírez1, José Moncada-Jiménez2  


Resumen

La obesidad durante la ni&ntilde;ez y la adolescencia est&aacute; aumentando en todo el mundo. Esta condici&oacute;n est&aacute; asociada con diversos factores de riesgo para enfermedades cr&oacute;nicas. Sin embargo, la prevalencia de sobrepeso y obesidad en esta poblaci&oacute;n ha sido dif&iacute;cil de cuantificar debido a que existe una gran variedad de definiciones. El prop&oacute;sito de este estudio fue determinar la prevalencia de sobre peso y obesidad de la poblaci&oacute;n estudiantil costarricense entre los 8 y 17 a&ntilde;os. Se seleccion&oacute; en forma aleatoria una muestra representativa de 9 900 estudiantes de escuelas y colegios costarricenses. Para definir sobrepeso y obesidad se utilizaron los puntos de corte del &iacute;ndice de masa corporal (IMC) recomendados por laOrganizaci&oacute;n Mundial de la Salud y la "International Obesity Task Force". Tambi&eacute;n se utiliz&oacute; el pliegue del tr&iacute;ceps como criterio para estimar la adiposidad. Se encontr&oacute; que las mujeres presentaron mayor IMC y adiposidad que los hombres en todas las edades analizadas. Estos aumentaron con la edad, especialmente en las mujeres a partir de los 12 a&ntilde;os. La prevalencia total para hombres y mujeres en los diferentes grupos de edad fueron: 14,9 a 23,3% (Sobrepeso 8 -11 a&ntilde;os), 4,8 a 9,9%. (Obesidad 8 -11 a&ntilde;os), 14,9 a 21,6% (Sobrepeso 12-&shy;17 a&ntilde;os) y 2,2 a 9,8% (Obesidad 12-17 a&ntilde;os). Estos porcentajes fueron mayores en las mujeres que en los hombres al calcularlos con base en los criterios internacionales. La prevalencia de obesidad fue m&aacute;s elevada cuando se utiliz&oacute; el pliegue del tr&iacute;ceps para estimarla. En conclusi&oacute;n, la prevalencia de sobrepeso de estudiantes costarricenses oscila de un 15 a un 23% y de obesidad de un 2,2 a un 9,8%.Esta var&iacute;a dependiendo de la edad, el sexo y del criterio utilizado para definirla. <br> </p> <font face="Arial,Helvetica"><font size="-1"><span name="style_bold">Palabras claves:</span> sobrepeso, obesidad, prevalencia, ni&ntilde;os, adolescentes.</font></font> <br> <font face="Arial,Helvetica"><font size="-1">&nbsp;</font></font> <br> <span name="style_bold"><font face="Arial,Helvetica"><font size="-1">Abstract <br> &nbsp; <br> </font></font></span> <div style="text-align: left;"> <small style="font-family: arial;">Child and adolescent obesity is increasing worldwide. It has been shown that this condition is closely related to several risk factors for chronic diseases. However, the prevalence of overweight and obesity in these populations has been difficult to quantify due to the wide variety of definitions used. The aim of this study was to determine the prevalence of overweight and obesity in Costa Rican students aged 8-17 years. A national-representativesample of&nbsp; 9990 subjects was randomly selected from Costa Rican elementary and high&shy;school institutions. In order to define overweight and obesity, the sex-and age&shy;specific body mass index (BMI) cutoffs recommended by the World Heath Organization (WHO) and by the International Obesity TaskForce (IOTF) were selected. The triceps skinfold thickness was also used as a criteria for adiposity. Females had higher IMC and adiposity than boys at all ages, and both parameters increased with age, especially in female students starting at 12 years of age. The global prevalence rates for males and females in the different age groups were 14.9 to 23.3% (overweight 8 -11 yrs.), 4.8 to 9.9%. (Obese 8-11 yrs.), 14.9 to 21.6%&nbsp; (Overweight 12-17 yrs.), 2.2 to 9.8% (Obese 12-17 yrs.). These rates tended to be higher in girls than in boys and also were higher when the IOTF cutoffs were used in comparison with the WHO criteria. The highest prevalence rate for obesity in this Costa Rican sample was achieved when the 90th percentile of the triceps skinfold thickness was used as the criteria. In summary, the prevalence of overweight in Costa Rican students was between 15 to 23% and the prevalence of obesity between 2.2 to 9.8%. These rates change according to age, sex, and when different criteria to define overweight and obesity are used. </small> <br> </div> <p style="text-align: justify;"><font face="Arial,Helvetica"><font size="-1">&nbsp;</font></font> <br> <font face="Arial,Helvetica"><font size="-1"><span name="style_bold">Key words:</span> overweight, obesity, prevalence, children, adolescents</font></font> <br> <span name="style_bold"><font face="Arial,Helvetica"><font size="-1">&nbsp;</font></font></span> <br> <span name="style_bold"><font face="Arial,Helvetica"><font size="-1">Introducci&oacute;n</font></font></span> &nbsp; <br> </p> <p style="text-align: justify;"><style="font-family: arial;">La obesidad se ha incrementado en forma significativa a escala mundial y actualmente se considera uno de los problemas de salud p&uacute;blica m&aacute;s dif&iacute;ciles de controlar (<a href="#1">1-5</a>). Se ha establecido que este incremento est&aacute; ocurriendo en todas las etapas de la vida, en la infancia (<a href="#6">6-8</a>), la ni&ntilde;ez, la adolescencia (<a href="#2">2</a>, <a href="#9">9</a>, <a href="#10">10</a>) y en la edad adulta (<a href="#3">3</a>, <a href="#11">11</a>). La escasa informaci&oacute;n sobre la prevalencia de obesidad en muestras representativas de ni&ntilde;os y j&oacute;venes ha sido una preocupaci&oacute;n reciente debido a que se ha documentado que el sobrepeso en la adolescencia est&aacute; asociado con la aparici&oacute;n de obesidad, enfermedades cr&oacute;nicas y una mayor mortalidad en&nbsp; la edad adulta (<a href="#12">12-14</a>). Se ha estimado que un 60% de los ni&ntilde;os con sobrepeso poseen por lo menos un factor de riesgo adicional para enfermedad cardiovascular, como por ejemplo, hipertensi&oacute;n, dislipidemia e hiperinsulinemia. Adem&aacute;s, un 30% de los casos nuevos de diabetes en ni&ntilde;os y adolescentes se podr&iacute;an atribuir a la obesidad (<a href="#15">15</a>). Por estas razones, se est&aacute; haciendo &eacute;nfasis en la necesidad de monitorear el comportamiento del sobrepeso y la obesidad desde la infancia, con el fin de establecer las tendencias de este problema y tomar medidas preventivas (<a href="#7">7</a>, <a href="#10">10</a>, <a href="#15">15-17</a>).&nbsp; <br> </p> <div style="text-align: left; font-family: arial;"><small>Los reportes sobre prevalencia de sobrepeso y obesidad en la ni&ntilde;ez y la adolescencia de diversas naciones, como en Estados Unidos (<a href="#2">2</a>, <a href="#9">9</a>), Espa&ntilde;a (<a href="#18">18</a>), Australia (<a href="#19">19</a>), China (<a href="#9">9</a>, <a href="#20">20</a>), Inglaterra ( <a href="#2">2</a>), Mozambique (<a href="#21">21</a>), Brasil ( <a href="#9">9</a>) y en general en Am&eacute;rica Latina (<a href="#22">22</a>) confirman que estos se han incrementado entre dos y cuatro veces en las &uacute;ltimas tres d&eacute;cadas. Aunque la mayor parte de los estudios provienen de pa&iacute;ses desarrollados, algunos reportes indican que &eacute;sta no es una enfermedad exclusiva de estos pa&iacute;ses (<a href="#5">5</a>, <a href="#9">9</a>, <a href="#21">21-23</a>); por ejemplo, en Brasil la prevalencia de sobrepeso se increment&oacute; de 4,1 a 13,9% entre 1 974 y 1 997 (<a href="#9">9</a>). <br> &nbsp;&nbsp; <br> Las limitaciones que presenta el &iacute;ndice de masa corporal (IMC) para clasificar el estado nutricional de ni&ntilde;os y adolescentes son bien conocidas, sin embargo, existe un consenso internacional sobre la conveniencia de utilizarlo para identificar a los j&oacute;venes con sobrepeso, dada su facilidad de uso en la pr&aacute;ctica cl&iacute;nica yen estudios epidemiol&oacute;gicos (<a href="#24">24-33</a>). Las estimaciones de prevalencia de sobrepeso y obesidad en la ni&ntilde;ez var&iacute;an en un rango muy amplio y tradicionalmente han sido de dif&iacute;cil interpretaci&oacute;n debidas principalmente a las diferencias en los criterios para definirlas y a la utilizaci&oacute;n de distintos valores de referencia. El comit&eacute; de expertos de la Organizaci&oacute;n Mundial de la Salud recomend&oacute; el uso internacional del percentil 85 de los datos extra&iacute;dos de la Encuesta Nacional de Nutrici&oacute;n de los Estados Unidos para clasificar a los adolescentes con sobrepeso y de los puntajes z de peso para talla para ni&ntilde;os menores de 10 a&ntilde;os (<a href="#33">33</a>, <a href="#34">34</a>). Esta recomendaci&oacute;n ha sido adoptada en varias naciones, sin embargo se ha criticado debido a la arbitrariedad con que se establecen los percentiles y a la inconveniencia de aplicar las normas estadounidenses en pa&iacute;ses con caracter&iacute;sticas muy diferentes (<a href="#29">29</a>, <a href="#35">35</a>). Recientemente, el grupo de trabajo sobre la obesidad en los ni&ntilde;os del "International Obesity Task Force (IOTF)" recomend&oacute; nuevas referencias internacionales para definir sobrepeso y obesidad en ni&ntilde;os y adolescentes (<a href="#32">32</a>, <a href="#35">35</a>). Se propusieron definiciones internacionales est&aacute;ndar con el fin de comparar las tendencias a escala mundial. Los investigadores mezclaron los datos de IMC de j&oacute;venes de 6 a 18 a&ntilde;os de estudios nacionales de Brasil, Inglaterra, Hong Kong, Holanda, Singapur y los Estados Unidos, y calcularon puntos de corte internacionales para cada edad y sexo (<a href="#35">35</a>). <br> &nbsp; <br> Este informe tiene el prop&oacute;sito de analizar la prevalencia del sobrepeso y obesidad de ni&ntilde;os y j&oacute;venes costarricenses con base en el IMC y los pliegues de grasa subcut&aacute;nea al aplicar diversos est&aacute;ndares de referencia. <br> &nbsp; <br> <span style="font-weight: bold;">Materiales y m&eacute;todos </span> <br> &nbsp; <br> Esta investigaci&oacute;n form&oacute; parte del proyecto para el establecimiento de normas nacionales de los componentes de salud f&iacute;sica desarrollado por la Universidad de Costa Rica y el Ministerio de Educaci&oacute;n P&uacute;blica entre 1996 y 1998 (<a href="#36">36</a>). Se seleccion&oacute; una muestra aleatoria representativa de estudiantes entre los 8 y 17 a&ntilde;os de ambos sexos matriculados en el sistema de educaci&oacute;n general b&aacute;sica p&uacute;blica con base en las listas proporcionadas por el Ministerio de Educaci&oacute;n P&uacute;blica del Gobierno de Costa Rica. Se midieron un total de 9 990 sujetos (n = 4 959 mujeres, y n = 5 031 hombres). El tama&ntilde;o de la muestra fue definido con base en la f&oacute;rmula para poblaciones infinitas. La muestra fue estratificada por nivel socioecon&oacute;mico y zona geogr&aacute;fica (urbana o rural). Se envi&oacute; una carta explicando las mediciones a los familiares y educadores de los estudiantes, y se les solicit&oacute; que firmaran un formulario de consentimiento informado para participar como sujetos en el estudio. Esta investigaci&oacute;n fue aprobada por la Vicerrector&iacute;a de Investigaci&oacute;n de la Universidad de Costa Rica. <br> &nbsp; <br> La medici&oacute;n de las variables antropom&eacute;tricas (peso, talla y pliegues de grasa subcut&aacute;nea) estuvo a cargo de un solo grupo de 5 administradores que viaj&oacute; por todo el pa&iacute;s con el objetivo de asegurar la confiabilidad de las mediciones. Este grupo estuvo conformado por fisi&oacute;logos del ejercicio y profesores de educaci&oacute;n f&iacute;sica que participaron previamente en un taller de capacitaci&oacute;n. Para la medici&oacute;n del peso corporal, se utiliz&oacute; una b&aacute;scula de plataforma marca Detecto&reg;, calibrada en kg (0,1 kg m&aacute;s cercano) y para la talla un tall&iacute;metro, calibrado en cm (0,1 cm m&aacute;s cercano). Los pliegues cut&aacute;neos fueron medidos con un calibrador de grasa marca Lange&reg; (Cambridge Scientific Instruments, Cambridge, MD) calibrado en mm (0,5 mm m&aacute;s cercano). La adiposidad se determin&oacute; midiendo los pliegues de grasa subcut&aacute;nea del brazo (tr&iacute;ceps) y de la espalda(subescapular), de acuerdo con el protocolo descrito previamente (<a href="#37">37</a>). Adem&aacute;s se midieron el peso y la talla para obtener el IMC (peso en kg / talla<span name="style_sup">2</span> en m). El peso corporal se midi&oacute; con el sujeto descalzo y con ropa ligera (pantal&oacute;n corto y camiseta). Se realiz&oacute; la lectura con el sujeto inm&oacute;vil, en posici&oacute;n erguida, la vista al frente y colocado en el centro de la balanza. Para medir la talla corporal, se coloc&oacute; al sujeto descalzo y en posici&oacute;n erguida, de espalda al tall&iacute;metro. El estudiante deb&iacute;a tener los mal&eacute;olos internos juntos y talones, gl&uacute;teos, hombros y regi&oacute;n posterior de la cabeza en contacto con el aparato. Posteriormente, con ambas manos se realiz&oacute; una ligera tracci&oacute;n hacia arriba en la mand&iacute;bula, orientando la cabeza en un &aacute;ngulo aproximado de 90&deg;, con el sujeto viendo al frente. <br> &nbsp; <br> La prevalencia de sobrepeso y obesidad se calcul&oacute; utilizando las tablas de referencia desarrolladas con base en las Encuestas Nacionales de Salud y Nutrici&oacute;n de los Estados Unidos y adoptadas por la OMS para uso internacional (<a href="#33">33</a>). En este estudio el percentil 85 del IMC se clasific&oacute; como sobrepeso y el percentil 95 como obesidad para efectos comparativos con la nueva clasificaci&oacute;n internacional de Cole (<a href="#35">35</a>). Tambi&eacute;n se utiliz&oacute; el percentil 90 del pliegue del tr&iacute;ceps (<a href="#38">38</a>). Los puntos de corte internacionales fueron desarrollados de acuerdo con los percentiles promedio de IMC de diversos pa&iacute;ses que pasan por un IMC de 25 kg . m</small><small><span name="style_sup">2</span></small><small> y un IMC de 30 kg . m</small><small><span name="style_sup">2</span></small><small> a la edad de 18 a&ntilde;os (<a href="#35">35</a>). El c&aacute;lculo de la prevalencia de sobrepeso tambi&eacute;n incluye elporcentaje de j&oacute;venes con obesidad (IMC&gt;25 kg . m<span name="style_sup">2</span>) y la prevalencia de obesidad corresponde al porcentaje de j&oacute;venes con IMC&gt;30 kg . m</small><small><span name="style_sup">2</span></small><small> a la edad de 18 a&ntilde;os. <br> &nbsp; <br> Para describir las caracter&iacute;sticas de los grupos de estudiantes se calcularon las medias y las desviaciones est&aacute;ndar (DS), as&iacute; como los percentiles por edad y sexo. Los datos se analizaron con la versi&oacute;n 8 del Programa Estad&iacute;stico para la Ciencias Sociales (SPSS, Inc., Chicago, IL). Se utiliz&oacute; un an&aacute;lisis de varianza (ANOVA) factorial 3 x 2 (clasificaci&oacute;n x sexo) para estudiar los puntajes de sobrepeso y obesidad. Tambi&eacute;n se aplicaron ANOVA factoriales 2 x 10 (sexo x edad) para estudiar las variables IMC y los pliegues subcut&aacute;neos (tr&iacute;ceps, subescapular, y la sumatoria de ambos). <br> &nbsp; <br> <span style="font-weight: bold;">Resultados</span> <br> &nbsp; <br> En este estudio se determinaron las caracter&iacute;sticas antropom&eacute;tricas de una muestra representativa nacional de 9990 estudiantes costarricenses entre los 8 y 17 a&ntilde;os. La estad&iacute;stica descriptiva de las variables por edad y sexo se presenta en el <a href="#cuadro1">Cuadro 1</a>. </small></div> <p style="text-align: left; font-family: arial;">Adem&aacute;s, en el <a href="#cuadro2">Cuadro 2</a> se incluyen los percentiles 50, 85, 90 y 95 de los pliegues de grasa subcut&aacute;nea del tr&iacute;ceps, la regi&oacute;n subescapular y de la sumatoria de ambos (tr&iacute;ceps + subescapular). Al estudiar el comportamiento de las medidas antropom&eacute;tricas de acuerdo con la edad y el sexo, se encontr&oacute; que exist&iacute;an interacciones significativas entre estas variables (p &lt; 0,05). La t&eacute;cnica de los efectos simples aplicada a los datos de IMC mostr&oacute; que este fue mayor en las mujeres entre los 11 y 17 a&ntilde;os (p &lt; 0,05), mientras que de los 8 a los 10 a&ntilde;os no se detectaron diferencias significativas entre los hombres y las mujeres (<a href="#fig1">Figura 1</a>). </p> <div style="text-align: left; font-family: arial;"><small>Asimismo, los valores promedio de grasa subcut&aacute;nea fueron mayores en las mujeres que en los hombres en todas las edades (p &lt; 0,05). Sin embargo, es a partir de los 12 a&ntilde;os donde se encontraron las mayores diferencias entre ambos sexos. En la <a href="#fig2">figura 2</a> se observa el aumento marcado de la adiposidad en la regi&oacute;n del tr&iacute;ceps de las mujeres, mientras que en los hombres &eacute;sta tiende a disminuir a partir de esa edad. Aunque la grasa de la regi&oacute;n subescapular de los hombres no se reduce, tambi&eacute;n se obtuvieron mayores diferencias a partir de los 12 a&ntilde;os (<a href="#fig3">Figura 3</a>). En el <a href="#cuadro3">cuadro 3</a> aparecen los puntos de corte para el percentil 90 y 95 del IMC con base en los resultados del estudio costarricense, la recomendaci&oacute;n internacional de la IOTF (<a href="#35">35</a>) y las normas publicadas por la OMS (<a href="#33">33</a>). Un ANOVA factorial demostr&oacute; que no existen diferencias significativas (p &gt; 0,05) entre los puntajes de corte del IMC al utilizar estos diversos criterios. <br> &nbsp; <br> La prevalencia de sobrepeso y obesidad para ni&ntilde;os y j&oacute;venes de ambos sexos se calcul&oacute; utilizando los criterios descritos anteriormente (<a href="#cuadro4">Cuadro 4</a>). Independientemente del criterio utilizado y de la edad, estas fueron mayores en las mujeres que en los hombres. Al utilizar como criterio el IMC, el sobrepeso oscil&oacute; entre un 15 y un 23% en las mujeres y entre un 14,9 y un 17,6% en los hombres, mientras que la obesidad oscil&oacute; entre un 2,6 y un 5,8% en las muchachas y un 2,2 a 5% en los muchachos. La prevalencia de obesidad se eleva significativamente si se utiliza como criterio la adiposidad subcut&aacute;nea (percentil 90 del pliegue del tr&iacute;ceps), alcanzando cifras de 9,9 % en las mujeres y 9,8% en los hombres. Tambi&eacute;n puede notarse que las cifras de prevalencia de sobrepeso son mayores al utilizar el criterio internacional que el de la OMS en los dos grupos de edad, sin embargo se presenta la situaci&oacute;n inversa para la prevalencia de obesidad en los j&oacute;venes entre 12 y 17. <br> &nbsp; <br> <span style="font-weight: bold;">Discusi&oacute;n</span> <br> &nbsp; <br> Dentro de los par&aacute;metros antropom&eacute;tricos m&aacute;s usados en la pr&aacute;ctica cl&iacute;nica y en estudios epidemiol&oacute;gicos para establecer sobrepeso u obesidad est&aacute; el IMC; sin embargo existe una alta variabilidad en los reportes de prevalencia debido a que no han existido criterios uniformes para establecerla. Este es el primer estudio donde se determina el grado de adiposidad subcut&aacute;nea y el IMC de una muestra representativa nacional de la poblaci&oacute;n estudiantil costarricense entre los 8 y 17 a&ntilde;os. Tambi&eacute;n se debe destacar el hecho de que la recolecci&oacute;n de la informaci&oacute;n fue realizada por un solo grupo de 5 investigadores que viajaron por todo el pa&iacute;s efectuando las mediciones, lo que avala la confiabilidad de los datos. En este estudio se comparan las prevalencias de sobrepeso y obesidad al utilizar diversos criterios. Estas se calcularon con base en las tablas de referencia publicadas por la OMS (<a href="#33">33</a>) y en los puntos de corte recomendados por la IOTF (<a href="#35">35</a>). <br> &nbsp; <br> Aunque en este estudio se encontr&oacute; que no exist&iacute;an diferencias significativas entre los puntajes de corte del IMC nacionales, internacionales y los recomendados por la OMS, por edad y sexo, las estimaciones de prevalencia basadas en el IMC variaron ampliamente al utilizar la referencia internacional y la de la OMS. Las diferencias m&aacute;s marcadas (6,6 a 8,3%), se presentaron en el porcentaje de sobrepeso (IMC &gt; al percentil 85 e IMC &gt; a 25 kg . m</small><small><span name="style_sup">2</span></small><small> a los 18 a&ntilde;os) de las mujeres; mientras que en los estudiantes del sexo masculino la diferencia promedi&oacute; un 2,2%. En ambos sexos la estimaci&oacute;n fue m&aacute;s elevada cuando se utiliz&oacute; el criterio de la IOTF (<a href="#35">35</a>). La prevalencia de obesidad (IMC &gt; percentil 95 o IMC &gt; a 30 kg . m</small><small><span name="style_sup">2</span></small><small> a la edad de 18 a&ntilde;os) fuemuy similar al comparar ambos criterios, sin embargo, donde se notaron mayores diferencias fue en la clasificaci&oacute;n de obesidad con base en el IMC y con base en el percentil 90 del pliegue del tr&iacute;ceps (4,8 al 7,4%). El percentil 90 del pliegue tricipital se ha utilizado para definir obesidad en varios estudios (<a href="#38">38-40</a>), que han reportado prevalencias cercanas al 16,3% de obesidad. Sin embargo, cabe preguntarse cu&aacute;l percentil del pliegue del tr&iacute;ceps deber&iacute;a usarse ya que si se realizan los c&aacute;lculos utilizando como base el percentil 95, las estimaciones de obesidad son muy semejantes entre s&iacute;, mientras que si se utiliza el percentil 85 como algunos expertos lo han recomendado (<a href="#38">38</a>, <a href="#41">41</a>), la estimaci&oacute;n de prevalencia resultar&iacute;a mucho m&aacute;s elevada. En este estudio, de todos los criterios analizados para establecer prevalencia de obesidad, el percentil 90 del plieguetricipital fue el que produjo los mayores porcentajes (entre 9,8 y 9,9% para hombres y mujeres, respectivamente), mientras que al utilizar como criterio el IMC se obtuvieron porcentajes entre el 2,6 a 5,8% para las estudiantes del sexo femenino y entre el 2,2 al 5% para el masculino. Estos resultados coinciden con otros reportes que indican que al utilizar el percentil 90 del pliegue del tr&iacute;ceps la prevalencia de obesidad fue un 3% superior que al utilizar el percentil 90 del IMC (<a href="#39">39</a>). En un estudio reciente donde se determin&oacute; el riesgo de sobrepeso al utilizar diversas t&eacute;cnicas, se demostr&oacute; que la prevalencia aumentaba conforme esta se calculaba con base en IMC, los pliegues de grasa subcut&aacute;nea y el m&eacute;todo densitom&eacute;trico (<a href="#26">26</a>). <br> &nbsp; <br> La Encuesta Nacional de Nutrici&oacute;n de Costa Rica realizada en 1996 (<a href="#42">42</a>) revel&oacute; que los ni&ntilde;os en edad escolar presentaban un 14,9% de sobrepeso (de acuerdo con normas de la OMS, 33). La publicaci&oacute;n m&aacute;s reciente de los resultados de la Encuesta de Salud y Nutrici&oacute;n de los Estados Unidos (<a href="#10">10</a>) indic&oacute; que en 1999 los ni&ntilde;os de ambos sexos entre los 6 a 11 a&ntilde;os presentaron un 13% de sobrepeso y los adolescentes entre los 12 y 19 a&ntilde;os un 14%. Estos datos se calcularon con base en las nuevas tablas pedi&aacute;tricas de crecimiento y de acuerdo con las recomendaciones de grupos de expertos que establecen que los j&oacute;venes en o sobre el percentil 95 se incluyen en la clasificaci&oacute;n de sobrepeso. De acuerdo con esta categorizaci&oacute;n 4,9% de los ni&ntilde;os entre 8 y 11 a&ntilde;os y el 5% de los j&oacute;venes costarricenses entre 12 y 17 a&ntilde;os presentan sobrepeso. <br> &nbsp; <br> Algunos autores han indicado que las estimaciones de sobrepeso de los ni&ntilde;os pueden oscilar entre un 11 y un 24% dependiendo del &iacute;ndice y las referencias utilizadas para calcularlo (<a href="#3">3</a>). La definici&oacute;n de sobrepeso y obesidad aplicada a los ni&ntilde;os no est&aacute; estandarizada, como s&iacute; lo est&aacute; para los adultos, y las recomendaciones para puntos de corte var&iacute;an ampliamente, del percentil 80 al 97 del IMC (<a href="#18">18</a>,<a href="#39">39</a>). Las estimaciones de prevalencia pueden distorsionarse a&uacute;n m&aacute;s cuando se utilizan poblaciones de referencia que no son semejantes a la poblaci&oacute;n estudiada. Este podr&iacute;a ser un problema com&uacute;n debido a que los est&aacute;ndares de los estudios provenientes de las encuestas nacionales de salud y nutrici&oacute;n (NHANES) de los Estados Unidos son ampliamente utilizados en todo el mundo y fueron adoptados por la OMS desde hace varios a&ntilde;os (<a href="#11">11</a>,<a href="#33">33</a>,<a href="#35">35</a>,<a href="#39">39</a>). <br> &nbsp; <br> En el estudio de Guillaume (<a href="#39">39</a>) se compar&oacute; el percentil 85 de 6 pa&iacute;ses con base en las referencias inglesas y estadounidenses y se encontraron dife&shy;rencias en prevalencia de hasta de un 13%. Este mismo autor reporta que en Argentina la prevalencia de obesidad se duplic&oacute; cuando se utiliz&oacute; como referencia los datos estadounidenses en comparaci&oacute;n con datos locales con base en la referencia de peso para talla (mayor de 120%). Asimismo, otro estudio concluy&oacute; que los puntos de corte para IMC para j&oacute;venes portugueses correspond&iacute;an a percentiles menores a los recomendados para los j&oacute;venes estadounidenses (<a href="#41">41</a>). La sugerencia de usar una &uacute;nica poblaci&oacute;n de referen&shy;cia para realizar comparaciones culturales entre pa&iacute;ses ha sido cuestionada debido a que se han utilizado las referencias de los Estados Unidos, pa&iacute;s que presenta una de las mayores prevalencias de obesidad en el mundo (<a href="#17">17</a>). Los resultados de este estudio coinciden con una comparaci&oacute;n que se realiz&oacute; entre diversos pa&iacute;ses, donde se demostr&oacute; que a&uacute;n peque&ntilde;as diferencias en los puntos de corte pueden producir amplias variaciones en la estimaci&oacute;n de la prevalencia. Adem&aacute;s, si se utilizan &iacute;ndices diferentes (lMC, pliegues sub&shy;cut&aacute;neos, percentiles o puntos de corte), las variaciones de prevalencia son a&uacute;n mayores (<a href="#39">39</a>). <br> &nbsp; <br> Los puntos de corte internacionales propuestos por un grupo de expertos (<a href="#35">35</a>) podr&iacute;an ser una buena alternativa para estandarizar estas definiciones en los ni&ntilde;os y adolescentes. Esta propuesta elimina la arbitrariedad de las definiciones anteriores y permite realizar comparaciones internacionales, sin embargo, no representa a la poblaci&oacute;n mundial. Aunque los investigadores consideran que incluir a otros pa&iacute;ses producir&aacute; pocas modificaciones, se requiere m&aacute;s investigaci&oacute;n al respecto. Uno de los primeros pa&iacute;ses en utilizar los nuevos puntos de corte internacionales de Cole (<a href="#35">35</a>) fue China, donde se encontr&oacute; una prevalencia de 9,2% de sobrepeso en ni&ntilde;os de ambos sexos (<a href="#43">43</a>). M&aacute;s recientemente se publicaron los resultados obtenidos al aplicar este criterio en Inglaterra. Se estableci&oacute; que la frecuencia de sobrepeso en los ni&ntilde;os ingleses de 9 a 11 a&ntilde;os fue de un 12,7% y en las ni&ntilde;as de un 16,7%, y la prevalencia de obesidad fue de 1,7% para los ni&ntilde;os y de 2,6% para las mujeres entre los 4 y 11 a&ntilde;os (<a href="#2">2</a>). Tambi&eacute;n, se han reportado prevalencias de sobrepeso (19,2 a 24,1 %) Y obesidad (3,3 a 5,7%) para j&oacute;venes australianos de 10 a 15 a&ntilde;os (<a href="#19">19</a>) con base en la recomendaci&oacute;n de la IOTF (<a href="#35">35</a>). Recientemente, se public&oacute; un estudio internacional (<a href="#9">9</a>) que informa sobre prevalencias de sobrepeso para ni&ntilde;os de 6 a 9 a&ntilde;os de Brasil (17,4%), China (11,3%), Rusia (10,2%), y Estados Unidos (22%); y para j&oacute;venes de 10 a 18 a&ntilde;os de estos mismos pa&iacute;ses (12,6, 6,2, 8,5 y 27,3%, respectivamente). Al utilizar los mismos criterios de la IOTF (<a href="#35">35</a>), los estudiantes costarricenses de 8 a 11 a&ntilde;os presentaron una frecuencia de sobrepeso de un 17,6% y las mujeres de un 23,3%. Las cifras para obesidad en ni&ntilde;os y ni&ntilde;as fueron 4,8% y un 5,8%, respectivamente. Los estudiantes del sexo masculino y femenino entre los 12 y 19 a&ntilde;os presentaron prevalencias de sobrepeso de 16,6 y 21,6%, y de obesidad de 2,2 y 2,6%, respectivamente. Estos datos de sobrepeso y obesidad en los costarricenses son preocupantes dado que se ubican en el l&iacute;mite superior del rango reportado por diversos pa&iacute;ses, lo que podr&iacute;a representar en un futuro el aumento de la probabilidad de una mayor prevalencia de adultos obesos y de los padecimientos asociados a esta enfermedad (<a href="#13">13-15</a>, <a href="#43">43</a>). <br> &nbsp; <br> Las diferencias encontradas en los reportes entre pa&iacute;ses pueden deberse a las variables que inciden en el proceso de crecimiento y desarrollo, como son los factores &eacute;tnicos, socioecon&oacute;micos, culturales, factores gen&eacute;ticos y ambientales (26, 44). Tambi&eacute;n se deben considerar diferencias entre los patrones de maduraci&oacute;n de la poblaci&oacute;n estudiada y de la poblaci&oacute;n donde se obtuvieron las referencias (<a href="#33">33</a>, <a href="#43">43</a>). Aunque el uso de las normas internacionales podr&iacute;a permitir el control de algunos de estos factores, todav&iacute;a se requiere mayor investigaci&oacute;n sobre la necesidad de incluir otros pa&iacute;ses en dichos est&aacute;ndares. <br> &nbsp; <br> Las elevadas cifras de sobrepeso encontradas en la poblaci&oacute;n joven de diversos pa&iacute;ses podr&iacute;an estar asociadas a factores que afectan el equilibrio energ&eacute;tico. Los cambios en los patrones de actividad f&iacute;sica (disminuci&oacute;n del gasto energ&eacute;tico) y de los h&aacute;bitos de alimentaci&oacute;n (aumento del consumo energ&eacute;tico) se consideran los responsables m&aacute;s importantes. Se ha determinado que se est&aacute; dando un incremento a la ingesta de alimentos ricos en calor&iacute;as por medio del alto consumo de comidas r&aacute;pidas y bebidas gaseosas, mientras que un alto porcentaje de j&oacute;venes no come las porciones recomendadas de frutas y vegetales. Por otra parte, el nivel de actividad f&iacute;sica que practican los ni&ntilde;os y j&oacute;venes se ha reducido debido a la gran cantidad de tiempo dedicada a la televisi&oacute;n, el transporte motorizado y la reducci&oacute;n de las oportunidades para realizar ejercicio en la comunidad y en las instituciones educativas (<a href="#1">1</a>, <a href="#3">3</a>, <a href="#11">11</a>, <a href="#43">43</a>, <a href="#45">45-49</a>). Seg&uacute;n los reportes de varios investigadores, en Costa Rica la situaci&oacute;n es muy similar. Se ha determinado que desde la ni&ntilde;ez se presentan h&aacute;bitos inadecuados de alimentaci&oacute;n y un aumento preocupante de la inactividad f&iacute;sica conforme avanza la edad (<a href="#50">50-52</a>). Las investigaciones coinciden en que el monitoreo del riesgo de sobrepeso y obesidad es una necesidad urgente; sin embargo, la validez de las t&eacute;cnicas utilizadas para realizar las mediciones de &eacute;stas han sido cuestionadas, dado que dependen de una serie de factores como son la sensibilidad y precisi&oacute;n de las mediciones, los patrones de referencia utilizados, el grado de madurez, el sexo y la procedencia (<a href="#18">18</a>, <a href="#35">35</a>). <br> &nbsp; <br> Los esfuerzos recientes por estandarizar estos monitoreos en la poblaci&oacute;n joven del mundo pueden ser una de las armas para combatir en forma m&aacute;s efectiva este problema. Aunque el debate acerca de los puntos de corte posiblemente contin&uacute;e, este estudio pretende proveer informaci&oacute;n base para realizar an&aacute;lisis y discusiones de esta problem&aacute;tica en Costa Rica. Por lo tanto, es recomendable un monitoreo continuo que permita establecer las tendencias de estas variables a lo largo del tiempo, estudiar las causas de los cambios y formular pol&iacute;ticas para la promoci&oacute;n de una vida m&aacute;s activa y una alimentaci&oacute;n saludable para prevenir la obesidad, as&iacute; como identificar grupos de alto riesgo y establecer programas de intervenci&oacute;n oportunos. <br> &nbsp; <br> En conclusi&oacute;n, la prevalencia de sobrepeso de estudiantes costarricenses oscila. de un 15 a un 23% y de obesidad de un 2,2 a un 9,8%. Estas cifras var&iacute;an dependiendo de la edad, el sexo y del criterio utilizado para definirlas. Los porcentajes de sobrepeso al usar los est&aacute;ndares internacionales son elevados (16,6 al 23,3%) en comparaci&oacute;n con los datos de otros pa&iacute;ses donde se ha aplicado este mismo criterio. <br> &nbsp; <br> <span style="font-weight: bold;">Agradecimiento</span> <br> &nbsp; <br> Un reconocimiento muy especial a la Dra. Marta Picado R., M.Sc. Glenda Pearson P., M.Sc. Cecilia Gonz&aacute;lez A., y a Rosiris Salas G., quienes con su esfuerzo y dedicaci&oacute;n hicieron posible la medici&oacute;n de los componentes de la salud f&iacute;sica a nivel nacional. Esta investigaci&oacute;n fue financiada por el Ministerio de Educaci&oacute;n P&uacute;blica y el Laboratorio de Rendimiento F&iacute;sico y Salud (LARENFISA) de la Escuela de Medicina de la Universidad de Costa Rica.</small>&nbsp;</div> <div style="text-align: justify;"> <div style="text-align: center;">&nbsp; <a name="cuadro1"></a><img alt="" src="http:/img/fbpe/rccm/v24n3-4/2497i01.JPG" style="width: 534px; height: 791px;"> <br> </div> <div style="text-align: center;">&nbsp;<a name="cuadro2"></a><img alt="" src="http:/img/fbpe/rccm/v24n3-4/2497i02.JPG" style="width: 525px; height: 725px;"> &nbsp;&nbsp; <br> </div> &nbsp; <center>&nbsp;<a name="cuadro3"></a><img alt="" src="http:/img/fbpe/rccm/v24n3-4/2497i03.JPG" style="width: 509px; height: 538px;"> <br> </center> <span name="style_bold"><font face="Arial,Helvetica"><font size="-1"> <br> Notas:</font></font></span> <br> <font face="Arial,Helvetica"><font size="-1">&nbsp;</font></font> <br> <font face="Arial,Helvetica"><font size="-1">1 Fern&aacute;ndez, A., Gonz&aacute;lez, C., Moncada, J., Pearson, G., Picado, M., y Salas, R. (2001). Normas nacionales.</font></font> <font face="Arial,Helvetica"><font size="-1">Componentes de salud f&iacute;sica: estudiantes costarricenses entre 8 y 17 a&ntilde;os. San Jos&eacute;, Costa Rica:</font></font> <font face="Arial,Helvetica"><font size="-1">Editorial Baula.</font></font> <br> <br> <font face="Arial,Helvetica"><font size="-1">2 World Health Organization. (1995). WHO Technical Report # 854. Physical Status: The Use and</font></font> <font face="Arial,Helvetica"><font size="-1">Interpretation of Anthropometry. Geneva, Switzerland: WHO.</font></font> <br> <br> <font face="Arial,Helvetica"><font size="-1">3 Cole, T. J., Bellizzi, M. C., Flegal, K. M., Y Dietz, W. H. (2000). Establishing a standard definition for child</font></font> <font face="Arial,Helvetica"><font size="-1">overweight and obesity worldwide: international survey. British Medical Journal, 320(6), 1-6.</font></font> <br> <br> <font face="Arial,Helvetica"><font size="-1">a Sobrepeso definido como un IMC = 25 kg . m<span name="style_sup">2 </span>a los 18 a&ntilde;os.</font></font> <br> <font face="Arial,Helvetica"><font size="-1">b Obesidad definida como un IMC = 30 kg . m<span name="style_sup">2</span> a los 18 a&ntilde;os <br> &nbsp;&nbsp; <br> </font></font> <center><a name="cuadro4"></a><img alt="" src="http:/img/fbpe/rccm/v24n3-4/2497i04.JPG" style="width: 514px; height: 318px;"> <br> </center> <font face="Arial,Helvetica"><font size="-1">&nbsp;<span name="style_bold"> <br> Nota:</span></font></font> <br> <font face="Arial,Helvetica"><font size="-1">1 Sobrepeso definido como un IMC = 25 kg . m<span name="style_sup">2</span> a los 18 a&ntilde;os y obesidad definida como un IMC = 30 kg . m<span name="style_sup">2</span></font></font> <br> <font face="Arial,Helvetica"><font size="-1">a los 18 a&ntilde;os (Cole et al., 2000).</font></font> <br> &nbsp;&nbsp; <br> <center>&nbsp;<a name="fig1"></a><img alt="" src="http:/img/fbpe/rccm/v24n3-4/2497i05.JPG" style="width: 441px; height: 394px;"> <br> </center> <center><a name="fig2"></a><img alt="" src="http:/img/fbpe/rccm/v24n3-4/2497i06.JPG" style="width: 442px; height: 381px;"> <br> </center> <center> <br> <a name="fig3"></a><img alt="" src="http:/img/fbpe/rccm/v24n3-4/2497i07.JPG" style="width: 409px; height: 386px;"> <br> </center> </div> <p style="text-align: justify;"><font style="font-weight: bold;" face="Arial,Helvetica"><font size="-1">&nbsp; Referencias</font></font><span style="font-weight: bold;"> </span> <br> <font face="Arial,Helvetica"><font size="-1">&nbsp;</font></font> <br> <font face="Arial,Helvetica"><font size="-1"></font></font> <font face="Arial,Helvetica"><font size="-1"><a name="1"></a>1. Centers for Disease Control and Prevention (CDC). Adolescent and School Health. Promoting Better Health</font></font> <font face="Arial,Helvetica"><font size="-1">for Young People through Physical Activity and Sports. A report to the President from the Secretary of Health</font></font> <font face="Arial,Helvetica"><font size="-1">and Human Services and the Secretary of Education. Online march 2001. Updated November 29, 2000</font></font> <font face="Arial,Helvetica"><font size="-1">(<a href="http://www.cdc.gov/nccdphp">http://www.cdc.gov/nccdphp</a>)</font></font> <br> </p> </span>

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1 Laboratorio de Rendimiento Físico y Salud, Departamento de Fisiología, Escuela de Medicina, Universidad de Costa Rica. E-mail: aileenf@cariari.ucr.ac.cr

2 Escuela de Educación Física y Deportes, Universidad de Costa Rica. E-mail: jmoncada@cariari.ucr.ac.cr  
 

Fechas de Publicación

  • Publicación en esta colección
    10 Dic 2010
  • Fecha del número
    Jul 2003
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