Introducción

En el contexto de la investigación, las Etapas Básicas de Música históricamente han estado inscritas a la Vicerrectoría de Acción Social como proyecto; no obstante, se encuentran en un proceso de traslado a la Vicerrectoría de Docencia. Lo anterior, en respuesta a una propuesta elaborada por la comisión de coordinadores de etapas básicas de música y el Consejo Universitario. En lo que respecta a la EBMT de la Sede del Atlántico de la UCR, tiene el propósito fundamental de fomentar la educación musical y su profesionalización desde edades tempranas en diversos instrumentos musicales, teoría musical y ensambles; al mismo tiempo brinda una proyección artística a la comunidad. Además, cuenta con un promedio de matrícula de 90 estudiantes por año en las secciones de cuerdas (violín, viola, cello, contrabajo y guitarra), vientos madera (flauta traversa, clarinete, saxofón), vientos metal (trompeta, trombón y tuba), piano, percusión y canto.

Cabe destacar que las clases de instrumento y canto son individuales, lo que permite un mayor acercamiento en los códigos comunicativos entre el docente-estudiante. Su plan de estudio también contempla un curso teórico-musical y talleres (coro de niños, taller lírico, orquesta de guitarras, camerata u orquesta sinfónica), los cuales son grupales, y esto permite una mayor interacción estudiante-estudiante. La totalidad de las clases en la EBMT son presenciales.

La EBMT inicia sus funciones en el año 1988, después de varias conversaciones entre un grupo organizado de la comunidad y el interés del decano de la Facultad de Bellas Artes de la UCR, Jorge Luis Acevedo (1987-1991). Según los registros de matrícula de la EBMT, para el año 1988 se reporta un total de 103 estudiantes, de los cuales conviene destacar la mezcla entre integrantes de la Banda Municipal de Turrialba y la comunidad que tenía el afán de integrarse al gremio musical, complementario al respaldo de la UCR (Camacho, 2006, p. 104)(1).

Por otra parte, el principal elemento que condicionó la transición de la presencialidad a virtualidad en las clases de la EBMT, además de todas las instituciones educativas del país, es la emergencia sanitaria que se declara a partir de la pandemia provocada por el COVID-19. Desde inicios del 2020, las autoridades de salud mundial alertaron sobre la aparición de un nuevo virus, caracterizado por una fácil propagación de persona a persona, con síntomas como: cuadro respiratorio febril, rinorrea, tos intensa y disnea, pueden presentarse vómitos y diarreas, además, puede provocar neumonía severa y fallo de algunos órganos (Serra, 2020, p. 1)(2).

Las recomendaciones basadas en las investigaciones continuas sobre el virus son el lavado de manos y el aislamiento social, el cual condiciona las interacciones sociales y repercute a nivel económico, social, educativo y en toda acción realizada por el ser humano. Como consecuencia, paraliza los procesos educativos y obliga a la virtualización de las diversas instituciones educativas para dar continuidad a los procesos.

En el caso de Costa Rica, a partir de los datos presentados por el Ministerio de Salud, se confirma el primer caso de COVID-19 en el país el 6 de marzo del 2020, lo cual repercute en la toma de decisiones por parte del gobierno y las autoridades universitarias. Lo anterior induce a una serie de restricciones como el aislamiento social; en el caso del ámbito educativo, enviar al personal docente, administrativo y población estudiantil en general a la casa. Esto desencadena una serie de decisiones a corto plazo para garantizar la continuidad de los procesos educativos; la capacitación del personal docente, el teletrabajo en el personal administrativo, y la participación del estudiantado en las actividades que podrían ser virtuales, mediante de la Resolución R-95-2020, de la Rectoría de la UCR. La EBMT tiene como finalidad la educación especializada en instrumentos musicales y canto, cumple con los requerimientos de las autoridades universitarias y de salud del país para adaptar todas las lecciones, recitales, clases maestras, reuniones, entre otras actividades, a plataformas digitales que permitan la continuidad de los procesos educativos, lo anterior según el oficio SA-EBMT-14-2020.

La investigación propone un estudio de los principales cambios que se presentan en las clases de canto de la EBMT y su afectación en la población estudiantil. Para esto, se contempla un estudio de la totalidad de la población que pertenece a la sección de canto, la cual cuenta con 8 estudiantes regulares con un rango de edad que va de los 19 a los 26 años, categorizados dentro de la etapa juventud temprana. Dicha etapa, para la Organización Mundial de la Salud (OMS) se caracteriza por una mayor independencia en las decisiones, un rol importante en las relaciones sociales y construcción de identidad desde las experiencias cotidianas (Krauskopf, 2015, p. 119)(3). La voz como instrumento interno del ser humano necesita de un estudio sistemático que requiere la construcción de imágenes mentales que promuevan posturas, entonación, respiración, articulación, entre otros (Barquero, 2007, p. 45)(4). Por consiguiente, el interés de este estudio es reflexionar sobre las ventajas y desventajas del uso de la tecnología en la clase de canto. Se utilizan como categorías de análisis: la división interna de la clase, la relación que se establece entre estudiante-docente, los cambios tecnológicos para el desarrollo de la clase, la motivación (relación comunicativa), etapas del desarrollo de la clase, atención de los estudiantes en la clase y percepciones y afectos.

Justificación

La EBMT se ha convertido en una institución de educación musical de referencia en el cantón de Turrialba, que en el año 2019 recibe por parte de la Municipalidad de Turrialba la asignación de interés cultural del cantón en el oficio n.o SM-922-2019 (Municipalidad de Turrialba, 2019), reconocimiento por sus más de 30 años en el aporte cultural y artístico de la región. En dicha institución convergen estudiantes de muchas zonas del país además de Turrialba, por ejemplo: Limón, Guápiles, Siquirres, Paraíso, Juan Viñas, Cartago, San José y San Carlos.

El interés de la propuesta de investigación es aplicar una entrevista a los estudiantes de la Cátedra de Canto de la EBMT, la cual contribuye con el análisis de los principales cambios en el género clases de música, por la virtualización de los procedimientos ante el impacto de la pandemia por COVID-19. Por consiguiente, se escoge la sección de canto de la EBMT, con un total de 8 estudiantes, con edades entre los 19 y los 26 años.

En Costa Rica, el COVID-19 ha obligado a reinventar los procesos en que se desarrollan las clases de música en las instituciones especializadas en canto e instrumentos musicales. Por lo tanto, este estudio responde a la necesidad de analizar los principales cambios producto de la virtualización de las lecciones y el impacto que esto provoca en la población estudiantil, en lo que respecta a la reorganización de las actividades, con el fin de valorar los cambios de los procedimientos de enseñanza/aprendizaje por medio de la virtualidad y, al mismo tiempo, concluir con los aspectos negativos y positivos de esta adaptación a las clases de canto en la EBMT.

Problema de investigación

El problema de investigación deriva de los diversos retos sociales, económicos, políticos y educativos que enfrenta el país por motivo de la pandemia por COVID-19. En este caso, la afectación que ha sufrido la EBMT como institución educativa, la cual tiene como objetivo principal preparar a ejecutantes musicales para una futura carrera universitaria, con problemáticas como la imposibilidad de realizar clases presenciales por acatamiento a las normas del Ministerio de Salud de Costa Rica, la limitación de herramientas tecnológicas o TIC, la accesibilidad a internet, entre otras.

A pesar de lo anterior, como se muestra en la tabla 1, la matrícula se mantiene en una media, la fluctuación principal es por la cantidad de estudiantes avanzados. Según las disposiciones de la coordinación de la EBMT, los estudiantes iniciales recibían 30 minutos de clase, estudiantes intermedios 45 minutos y estudiantes avanzados 60 minutos. Lo anterior, como indicador cuantitativo muestra que la población estudiantil no ha desertado, según los datos de la oficina administrativa de la EBMT. Esto permite una valoración de los procesos de virtualidad de las clases de música que se imparten y cómo afectan a la población estudiantil.

Por consiguiente, la investigación indaga en aquellos elementos que tienen que ver con: la división interna de la clase, la relación que se establece entre estudiante-docente, los cambios tecnológicos para el desarrollo de la clase, la motivación (relación comunicativa), etapas del desarrollo de la clase, atención de los estudiantes en la clase y percepciones y afectos. Para lo cual se plantean las siguientes preguntas de investigación: ¿cuáles son los principales cambios del género clases de música en la sección de canto de la EBMT con la virtualidad?, ¿cómo afecta el cambio de la presencialidad a la virtualidad en el estudiantado de la sección de canto de la EBMT?, ¿cuáles recursos tecnológico-informáticos se utilizan en las clases de música de la sección de canto de la EBMT?, y ¿cuáles son los resultados?

Por lo tanto, se plantean los objetivos de la siguiente forma: como objetivo general, analizar el género clases de canto en la EBMT para la valoración de la virtualidad de las lecciones en el primer semestre del 2020; como objetivos específicos, describir las experiencias del estudiantado de la sección de canto de la EBMT en la virtualización de las clases de música, comparar las características de las clases presenciales y virtuales, y determinar los principales cambios de la presencialidad a la virtualidad en las clases de música de la EBMT.

Marco teórico conceptual

Clases de música

La categoría clase de música, para efectos del estudio, se puede conceptualizar como un proceso de interacción comunicativa entre docente y estudiante que, como resultado, desarrolla la construcción de conocimiento mediante la participación, interactividad y construcción de significados (Videla, 2010, p. 188)(5), por medio del lenguaje y los procesos comunicativos. Asimismo, el papel de la interacción comunicativa en la educación se manifiesta como un proceso comunicativo entre los actores sociales inmersos, lo cual es clave para el desarrollo efectivo del conocimiento global (Herrero, 2012, p. 142). La clase de música es un generador de alternativas técnico-interpretativas en un espacio de mediación cultural para la incorporación de lo simbólico con respecto a la otredad, el reconocimiento de la condición humana y el compromiso con un conocimiento específico (Rivera, 2017, p. 210).(6)

Desde la experiencia del investigador, las clases de música, específicamente la clase de canto, se caracterizan por una interacción directa entre docente y estudiante, debido a que las clases son individuales con un maestro especializado y con un estudio sistemático (Barquero, 2007, p. 45), lo que produce una interacción comunicativa más cercana y de confianza. Además, la clase de canto que se utiliza en Costa Rica deriva de la pedagogía vocal tradicional, la cual se caracteriza por un modelo pedagógico basado en la imitación y la observación directa, asociado al modelo de conservatorio europeo y que, a su vez, aporta a los procesos de enseñanza-aprendizaje como la imaginación, la comunicación intersubjetiva y los procesos cognitivos subyacentes (Beltramone et al., 2017, p. 75)(7).

Es importante mencionar que en la clase de canto, al tener esta característica de exclusividad, se realiza un contrato o plan de trabajo según las necesidades de cada estudiante, de acuerdo con el conocimiento que tenga el docente sobre su estudiante, que toma en cuenta necesidades a nivel de avance, proyección de metas a futuro y, análogamente, situaciones personales, emocionales y proyecciones que sean motivación para un estudio del canto más adecuado. Este plan debe contener: descripción del curso, los objetivos, los contenidos, la metodología, las actividades para cumplir con los objetivos, el cronograma, la bibliografía pertinente, el número de créditos, las horas lectivas, los requisitos y correquisitos, la obligatoriedad de la asistencia a lecciones, según corresponda y de acuerdo con lo establecido en el artículo 14 bis y las normas de evaluación, las cuales deben estar debidamente desglosadas y con las ponderaciones de cada aspecto por evaluar (Capítulo V, artículo 14, Reglamento de Régimen Académico Estudiantil)(8).

La clase de canto se divide principalmente en las siguientes partes: un saludo que, por lo general, tiene construcciones simbólicas únicas entre los individuos, mezcla situaciones personales, de salud, familia, emocional, entre otros; seguidamente, un calentamiento vocal que cumple con la función técnica de la clase. Luego, el repertorio, que puede ser desarrollado de la siguiente manera: trabajo del texto, eso quiere decir, traducción, fonética, pronunciación y memoria; ritmo con letra de la obra musical; la melodía, seguido de la melodía con acompañamiento y, finalmente, la interpretación, correcciones por parte del docente y cierre de la clase.

Además, para el proceso de la clase de canto se deben tener en cuenta los objetivos técnicos, interpretativos y metodológicos, los cuales están relacionados por un entrenamiento mental, vocal y musical. Esto es el resultado de un plan de trabajo en acuerdo comunicativo entre el docente y el estudiante (Villegar, 2017)(9); por lo tanto, se toma como un proceso para desarrollar las principales características del canto: la respiración, la resonancia, el vibrato, la potencia y la musicalidad (Barquero, 2007).

Virtualización educativa

La virtualidad de la educación no es un concepto nuevo dentro del ámbito del discurso educativo, pero en el contexto actual producto de la pandemia por COVID-19, obliga a desarrollar estrategias alternativas a la presencialidad acostumbrada, condicionadas por el aislamiento social, transformación de los espacios y las posibilidades simbólicas (Álvarez et al., 2020, p. 27)(10).

Con respecto a esta virtualización, se puede mencionar que el estudiante está en un campo de mayor soledad y tiene acceso a más información en el instante, pero pierde el carácter social y comunicativo que caracteriza a la educación tradicional o presencial, que desde un inicio fue pensada como un espacio para la socialización y la interacción grupal (Videla, 2010, p. 190). La virtualidad tiene su aporte en la comprensión de procesos y objetos que sean más funcionales en la investigación y gestión de los recursos informativos, interacción por medios como los cursos electrónicos, bibliotecas virtuales y comunicación por distintos medios con docentes y compañeros (Silvio, 1998, p. 28)(11).

Por consiguiente, las características de la educación virtual se distinguen por el factor económico, los espacios para acceder, grabar y editar la información en su poder, un dominio mayor del espacio y tiempo, no se requiere personal de mantenimiento de las instalaciones ni una planta física para el desarrollo de las clases. Además, el estudiante puede cursar las materias sin necesidad de desplazarse, se puede tener mayor flexibilidad de los horarios en función de los intereses y otras responsabilidades, se dispone de un campus global, chat u otros medios para intercambio de información, consultas, entre otros (Gustems y Calderón, 2002, p. 2)(12). Además, la facilidad para un aprendizaje colaborativo basado en el descubrimiento, resultados focalizados de aprendizaje, interacción, retroalimentación y, finalmente, aprendizaje personalizado (Nevsgoda, 2017, p. 4)(13).

Por otra parte, la enseñanza presencial permite una mejor interacción docente-estudiante y la interacción comunicativa entre pares. Así, existen dos posibilidades de procesos comunicativos: en primera instancia, el intercambio proximal, el cual se caracteriza por ser más directo, recíproco e inmediato. Se puede variar el tipo de intercambio comunicativo a partir de la observación con contenidos verbales y no-verbales (la postura corporal, los movimientos, la mirada, el vestuario, la respiración), así como las características de la voz (intensidad, tono, cadencia, volumen, velocidad, ritmo, timbre...) que completan el significado de las palabras empleadas. En segunda instancia, se caracteriza por una estructuración de contenidos curriculares, donde se llevan a cabo la metodología y los tipos de actividades (Gustems y Calderón, 2002, p. 3). El docente, como moderador del conocimiento, tiene mayor facilidad de interacción comunicativa, utilización de recursos para mantener la atención y la motivación del estudiantado e incluso ser más reflexivo en las clases presenciales (Gustems y Calderón, 2002, pp. 2-3).

El traslado de la educación presencial a la educación virtual es impuesta por la emergencia sanitaria que demandó la interrupción de la cotidianidad educativa. Para dar continuidad a los procesos de enseñanza-aprendizaje durante la pandemia, y como principal herramienta para paliar el aislamiento social que demandan las autoridades sanitarias y Gobiernos, se emplean las TIC (Álvarez et al., 2020, p. 28).

Recursos tecnológicos

Las TIC se utilizan como principal recurso tecnológico, las cuales en el discurso de la educación musical no deben sustituir el trabajo presencial de las clases de instrumentos musicales, sino complementarlas. La presencialidad es de mayor valor en la interpretación musical, específicamente en las clases de canto donde media el movimiento corporal para la imitación u observación de cada detalle técnico de la voz, además del sonido condicionado por la proyección y la vibración. Las TIC pueden utilizarse como recurso de innovación y mejora de la docencia (Serrano, 2017, p. 155)(14).

Además, las TIC se deben entender como aquellas herramientas que brindan la tecnología digital por medio de aparatos tecnológicos como: computadoras portátiles, teléfonos inteligentes, tabletas y computadoras de escritorio y, análogamente, la internet. Dentro de las TIC se incluye el material digital, como el software, aplicaciones y plataformas que utilizan los aparatos tecnológicos para cumplir sus funciones (Jaramillo et al., 2009, p. 161)(15).

Actualmente, en el aporte de las nuevas tecnologías a la pedagogía del canto se puede mencionar el uso de múltiples dispositivos electrónicos como: los micrófonos, procesadores de voz, software para el estudio de la voz asistido por computadora y algunas plataformas de videoconferencias para el desarrollo de las clases. Esto ha repercutido en la forma y contexto en los que se desarrolla la clase de canto (Beltramone et al., 2017, p. 71).

Percepción

En este estudio la percepción es relevante para el análisis social del abordaje de la virtualidad de las clases de canto por parte de los estudiantes, por lo que se puede conceptualizar como un proceso donde se extrae y selecciona la información de mayor interés para el individuo, lo cual le permite un nivel de racionalidad y coherencia con respecto al mundo exterior (Gilberto, 2004, p. 90)(16). El individuo se asume como formador de representaciones mentales que cumplen con la función de extraer lo esencial de la realidad externa (Gilberto, 2004, p. 96).

Por consiguiente, cuando se habla de mundo exterior o realidad externa se refiere al contexto y las características que construyen, desde la subjetividad, las valoraciones de los cambios o diferencias en el ambiente y cómo el estudiante puede sentirse u observarse en esa realidad (Flores y Reyes, 2010, p. 229)(17). La percepción de esos cambios en el ambiente, por parte del estudiantado, con los cambios pedagógicos provocados por el COVID-19 responden a satisfacer las necesidades del estudiantado; en otras palabras, la necesidad de medir o tener en consideración la percepción de la población estudiantil en la virtualización de las clases, donde la motivación juega un rol importante para evitar la deserción y darles continuidad a los procesos educativos (Oliva y Gómez, 2014, p. 184)(18).

Por ende, los procesos de virtualización tienen relevancia para identificar las percepciones de la calidad de la educación por parte del estudiantado. Ahora bien, la técnica de la voz mezcla los dos medios expresivos para la interacción que tiene el ser humano, el cuerpo y la voz, por lo cual, las sensaciones, emociones o motivaciones que tenga el estudiante afectan directamente la emisión, el sonido y hasta la afinación (Barquero, 2007, p. 45). Para el estudiantado es relevante el papel de la motivación en este cambio de clases presenciales a clases virtuales. Se pueden mencionar aspectos que están inmersos más allá del plano cognitivo como las intenciones, las metas, las percepciones y creencias que tiene el sujeto que aprende. De esta manera, se relaciona el ámbito cognitivo con el afectivo-motivacional dentro de los procesos de enseñanza y aprendizaje en una clase de música (García y Doménech, 1997, p. 2)(19).

Se considera que la motivación cumple con la función de que el estudiantado tenga la capacidad de aprender e insistir en los logros académicos por medio de la expectativa y el valor asumido para cumplir con las metas en sus procesos educativos. Dicha motivación es responsabilidad de los docentes y administrativos para potenciar los resultados en pro de la constancia y el éxito de los procesos técnico interpretativos del canto (Rascón y Herrera, 2019, p. 88)(20). De modo que la pertinencia de la percepción es relevante para la atención y motivación del estudiante en la clase de canto. Por esta razón, los procesos cognitivos ayudan en el aprendizaje del canto y, a su vez, en los resultados que tiene cada estudiante en lo que respecta a su nivel, cualidades y capacidades (Bañuelos, 1990, p. 58)(21).

Marco metodológico

Para la elaboración de este trabajo, se desarrolla un análisis de la entrevista aplicada a los 8 estudiantes que pertenecen a la sección de canto de la EBMT. Los requisitos del estudiantado que participa en las entrevistas son: ser mayores de 18 años, pertenecer de forma regular a la sección de canto de la EBMT y tener la experiencia de llevar clases tanto presenciales (durante el 2019) como virtuales (primer semestre 2020), en la misma institución. Las entrevistas se realizarán mediante la aplicación Zoom y serán grabadas en audio, con una duración que va de los 12 hasta los 19 minutos cada una, por lo que se obtuvo un total de 2 horas y media de grabación, aproximadamente.

Cada entrevista se registró en un archivos de audio digital, luego, se transcribió para su posterior análisis, que propone los siguientes pasos:

• Se analiza el género clase de música, con sus respectivas secciones dentro de la presencialidad.

• Se detallan las variables de la investigación: clase de música, uso de las TIC en las clases y percepciones de la virtualidad educativa.

• A partir de lo anterior, se elabora y aplica la entrevista.

• Análisis de los resultados a partir del género clase de música, que conlleva a prácticas sociales, la interacción comunicativa y el ámbito educativo.

• Las categorías de análisis se desglosan a partir de ese conocimiento de la siguiente manera: la división interna de la clase, la relación que se establece entre estudiante-docente, los cambios tecnológicos para el desarrollo de la clase, la motivación (relación comunicativa), etapas del desarrollo de la clase, atención de los estudiantes en la clase, percepciones y afectos.

Resultados, análisis y discusión

Dentro de las principales categorías generales del estudiantado de la sección de canto de la EBMT se encuentran las mencionadas. Estas se explicarán a partir de algún ejemplo y, luego, se señalará su relevancia desde una perspectiva crítica y social (modelo social). Los textos para analizar son las respuestas de la entrevista aplicada, los cuales dentro de su secuencia dominante tienen una función descriptiva, dialógica y narrativa.

En este trabajo, por motivos de espacio, solo se presentan algunos ejemplos de los resultados de las entrevistas dentro de esas categorías de análisis presentes que componen el discurso sobre los cambios del género clase de música de la presencialidad a la virtualidad por la pandemia provocada por el COVID-19.

División interna de la clase de canto

La clase de canto está dividida, según los ocho sujetos participantes, de la siguiente manera: un saludo, una pequeña conversación de cómo estuvo la semana (parte de la relación cercana entre estudiante-docente), ejercicios de calentamiento, algunos aspectos técnicos, revisión del repertorio, comentarios o indicaciones a mejorar para la próxima clase y un cierre. Además, la clase es individual y tiene una duración que oscila de los 40 minutos a 1 hora. Por este motivo el sistema comunicativo y la interacción social es muy cercana dentro de la presencialidad.

Con base en los resultados de la entrevista aplicada, la clase de canto mantiene su estructura al pasar a la virtualidad. No obstante, se detallan algunos cambios en la situación específica de comunicación, como se muestra en el siguiente ejemplo: Sujeto 1: Para mí es igual, tal vez, la manera que uno lo corrigen por ser tan de mente, se pierde un poquito más de tiempo por la conexión. Sujeto 2: Al menos, no sé, ha cambiado poco, la mecánica se ha mantenido, lo que afecta más son los factores externos. Sujeto 4: Este, cambios no tanto, tal vez en el hecho de la cámara uno trata de posicionarla, pero tal vez ciertas cosillas podrían mejorar en la presencialidad, como la postura o el rango visual. Sujeto 7: En mi caso, tal vez la interacción de confianza entre estudiante profesor, la comprensión de ciertos ejercicios es distinto, tal vez de forma presencial podría uno entenderlas mejor. Sujeto 8: A veces se pega el internet o el sonido llega a destiempo. Tal vez el hecho de que está uno presionado, pero digamos que en clase presencial esta uno más atento a ciertas cosas.

Por consiguiente, los principales cambios de la presencialidad a la virtualidad, según lo mencionan los participantes, son: la afectación en la fluidez de la clase por factores externos, la inestabilidad en la conexión a internet, lo que provoca problemas de comunicación y comprensión de las indicaciones y la visualización limitada por la cámara. Con respecto a las diversas partes de la clase de canto, según los entrevistados, no existen mayores cambios en las dinámicas, ejercicios o formas de abordar el repertorio, con la salvedad de que, en el caso del calentamiento, es de menor duración y con un nivel de dificultad menor al acostumbrado en la presencialidad; como lo menciona el sujeto 8: Antes se utilizaba más tiempo en ejercicios del calentamiento, ahora no, las clases se van más rápido, se dura menos en los ejercicios, no es igual, por el registro se disminuye. Del mismo modo pasa con el repertorio, para el cual cuesta sacar el tiempo necesario.

En lo que respecta a la consideración final de la comparación entre las clases virtuales y presenciales, todos los participantes contestaron que prefieren la presencialidad para el desarrollo de la clase de canto. La virtualidad se ha convertido en una solución provisional por la situación del COVID-19, como lo menciona el sujeto 5: Yo, por decisión propia, no llevaría canto por la virtualidad, lo hago porque no hay de otra. El sujeto 2: Al principio iba a desertar, no lo hice para no perder el proceso y con la esperanza de que todo vuelva a la normalidad.

Relación que se establece entre docente-estudiante

Dentro del género clase de música, específicamente la clase de instrumento o canto, los sujetos afirman que en la virtualidad se mantiene una relación muy cercana entre el docente y el estudiante, por las características de la clase de canto, ya sea virtual o presencial, es una clase individual. Además, desde la aplicación de la virtualidad existe una mayor interacción por medio del teléfono personal, correo electrónico o redes sociales, lo que produce, según los participantes, que la comunicación sea más inmediata, al producir nuevos códigos, símbolos, rutinas, entre otros, del paso de la presencialidad a la virtualidad. Lo anterior se justifica por parte de los participantes en las siguientes citas:

Según los entrevistados, la virtualización ha permitido un mayor acercamiento dentro de la relación docente-estudiante, por la constante comunicación a partir de los mensajes, audios y grabaciones de los avances, asimismo, con dudas o exposición de casos. La comunicación virtual permite un reconocimiento de la condición humana que tiene tanto el docente como el estudiante.

Por otra parte, según la respuesta de los sujetos 1, 2, 4, 5 y 8, la limitación de la cámara, la inestabilidad en la conexión a internet o el audio, dificultan tener una percepción de las reacciones emotivas por parte del docente, como lo ejemplifica el sujeto 8: Complicado, por el internet a veces ni siquiera la puedo ver y el sujeto 2: En mi caso específico, no por el modus operandi, no tengo mucho espacio, el acomodo no me permite verla a la cara, inclusive a veces se quita la cámara y no se ve la cara. Por esto, a partir de la implementación de la virtualidad la comunicación verbal es la única vía para comprender las indicaciones y comentarios de retroalimentación del docente.

Cambios en el uso de la tecnología

Uno de los principales inconvenientes de la pandemia provocada por el COVID-19 en el ámbito educativo es el aislamiento social, lo que obliga a los centros educativos a adaptar estrategias para dar continuidad a los procesos. Para esta emergencia sanitaria, las herramientas más factibles son las TIC, para lo cual los entrevistados en su mayoría mencionan tener lo necesario, por ejemplo:

Con respecto a la voz, instrumento del canto, se necesita una buena captación del sonido por parte del equipo digital, es decir, una buena tarjeta de video y un buen micrófono para el desarrollo adecuado de la clase. Por ello mencionan:

La sección de canto de la EBMT considera que la utilización de las TIC en los procesos educativos los tomó de sorpresa, como lo indica el sujeto 4: Bueno, eh, en parte no ha sido una mala experiencia, obviamente se sacaría más provecho de manera presencialidad, ni yo ni la profe estábamos preparadas para algo así, pero no quiere decir que no me ha permitido avanzar, ya que, en la presencialidad son elementos que no se implementaban dentro del proceso educativo, por lo que hubo que ajustarse a las necesidades que demanda la virtualidad en la educación. A pesar de lo anterior, los estudiantes consideran que cuentan con las herramientas tecnológicas necesarias, pero reconocen que podrían mejorar con un buen micrófono o parlantes que aumenten la calidad del sonido. Esto se ejemplifica en el comentario del sujeto 4: Sí, bueno cuento con buen internet y con computadora propia, tal vez lo que siento es que me hace falta tener el micrófono apto o mejores parlantes.

Para estas clases se utiliza la aplicación Zoom, la cual los estudiantes consideran como la más apta para el desarrollo de una clase canto. A pesar de que pareciera que la comodidad de la casa podría ser un elemento positivo, se considera que no se cuenta con un espacio adecuado para llevar a cabo la clase de la mejor forma.

La motivación (relación comunicativa)

La motivación juega un papel vital en los procesos de los cantantes, ya que el instrumento al ser parte del organismo físico (cuerpo) se relaciona con la parte emotiva y las sensaciones. Con respecto a esto, los participantes aportan:

Además, los entrevistados consideran que tienen el apoyo de las personas que habitan en su hogar dentro de las posibilidades específicas de cada uno. Además, mencionan que en un principio fue frustrante y desalentador por la nueva experiencia. Por otra parte, con respecto a su percepción de la clase de canto, los entrevistados mencionan emociones como nervios (sujeto 7), frustración (sujeto 5), desalentador (sujeto 2), situación difícil (sujeto 8); contrariamente, indican que su proceso de enseñanza-aprendizaje(22) ha mejorado, como menciona el sujeto 2: Sí, no tanto por el aspecto técnico más bien por el asunto interpretativo, la forma de acercarse a distinto repertorio, o el sujeto 4: He logrado un gran avance este semestre, y el sujeto 8: Siento que sí, pero talvez no igual a como si estuviera en clases presenciales.

Atención de los estudiantes

La virtualización de las clases de canto, según las personas entrevistadas, trae una serie de complicaciones que se deben valorar. Por ejemplo, la concentración durante la clase, como se describe por parte de los participantes:

Por consiguiente, se considera que, según las opiniones anteriores, preocupan las constantes fallas de comunicación debido a la conectividad o calidad del video o audio. Además, estar en el hogar tiene sus partes positivas como la relajación, la comodidad del hogar, la alimentación, entre otras. En contraposición, el espacio se vuelve un problema, ya que convivir con otras personas produce una serie de interrupciones, por ejemplo, ruido de los vecinos y otros sonidos provenientes del exterior. Todo esto evita un desarrollo óptimo de la clase.

La comparación entre las clases de canto en su paso de la presencialidad a la virtualidad no sufre mayores cambios en los aspectos formales, como el modelo de imitación y observación, la división de la clase establecida en saludo, calentamiento, vocalización y repertorio, sino en la situación específica de comunicación, ya que la interacción comunicativa es transformada por la virtualidad y los recursos tecnológicos que median la comunicación entre estudiante y docente. Por otra parte, el estudiantado percibe que, según los procesos de enseñanza y aprendizaje, la calidad de las clases virtuales se mantiene en comparación con las tradicionales, la motivación para cumplir las metas, la continuidad de las clases de canto y la proyección del futuro como intérprete son variables que repercuten en la atención del estudiante en las clases de canto.

Conclusiones

Al finalizar el presente trabajo se evidenciaron los elementos o aspectos que produjeron un cambio en el género clases de música, entre la presencialidad y la virtualidad, el cual es condicionado por la pandemia provocada por el COVID-19. Esta emergencia sanitaria a nivel mundial obliga a un aislamiento social, lo que repercute, según la propuesta de Charaudeau (2012)(23), en la estructuración del sistema comunicativo; esto se traduce en cambios en la clase de música en la situación global de comunicación (SGC) y la situación específica de comunicación (SEC).

En respuesta a las preguntas de investigación, los principales cambios son mediados por el tipo de interacción comunicativa que mantiene el docente con el estudiante de canto en el espacio de construcción del conocimiento, el cual sufre el mayor cambio al pasar de la presencialidad a la virtualidad y que, a su vez, es validado por el estudiante en su percepción de cuánto aprende y la calidad del conocimiento que adquiere. Esta validez es necesaria en los procesos educativos de la música y, principalmente, del canto, ya que la relación comunicativa es mediada por la conectividad del internet, la limitación de la pantalla y la calidad del sonido por parte del cantante. Lo anterior no genera un cambio radical en la estructura de la clase de canto en la EBMT, pero sí en el nivel interpretativo y técnico del estudiante. Los factores que más influyen en el proceso de aprendizaje virtual son la dificultad de los ejercicios, los espacios adecuados para llevar a cabo la clase de canto y los tiempos de estudio para abordar el repertorio.

Bibliografía

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