El libro analizado en este comentario es el estudio de Ruth Cubillo sobre las obras ensayísticas de varias mujeres escritoras de Costa Rica: Mujeres ensayistas e intelectualidad de vanguardia en la Costa Rica de la primera mitad del siglo XX. Para lo cual, este escrito presentará, en primer lugar, una breve biografía de la autora; en segundo lugar, se explicará la temática del libro; en tercer lugar, se analizará si la obra se inserta en determinado debate sobre el tema en cuestión; en cuarto lugar, se realizará un análisis de los métodos y procedimientos utilizados por la autora en el estudio; en quinto lugar, se hará un análisis crítico con respecto a los aciertos y limitaciones del libro y, finalmente, se intentará trazar uno o varios caminos a seguir a partir del estudio de la doctora Cubillo, de manera que se logre un aporte al campo con apoyo en su estudio.
Con respecto a la autora, Ruth Cubillo tiene una carrera de más de veinte años como profesora universitaria y es actualmente profesora en la Universidad de Costa Rica, donde imparte cursos de literatura comparada y de investigación literaria para bachillerato, además de cursos de teorías literarias para el Posgrado en Literatura de la misma universidad.
Cubillo es doctora en literatura por la Universidad Autónoma de Barcelona, España. Es investigadora y lleva varios años estudiando género y literatura, además sobre escritoras costarricenses de la primera mitad del siglo XX y actualmente investiga las concepciones de la pobreza en la narrativa costarricense y centroamericana del siglo XX.
Sus publicaciones, hasta el momento, son: Mujeres e identidades. Las escritoras del Repertorio Americano (1919-1959) en el 2001; Mujeres ensayistas e intelectualidad de vanguardia en la Costa Rica de la primera mitad del siglo XX, en el 2011; Novelistas españolas del siglo de oro: la obra de Mariana de Carvajal y Saavedra, en el 2014, y “Representaciones de la pobreza y la desigualdad social en la narrativa costarricense: 1890-1940”. Los primeros, libros de la Editorial UCR y el último publicado en la prensa. También ha publicado varios artículos en revistas especializadas sobre literatura española y costarricense.
Además de ser profesora en la UCR y publicar varios libros, también ha impartido cursos cortos y conferencia en universidades e instituciones de investigación extranjeras, tales como la Universidad de Santiago de Compostela, en España; la Universidad de Passau, en Alemania; la Escuela de Estudios Hispanoamericanos, en Sevilla y la Universidad de San Martín en Argentina.
Temática del estudio
Temática general:
Con respecto a la temática general, Cubillo indica, en los inicios del libro, que gran parte del objetivo del estudio es generar una especie de biografía colectiva de estas escritoras. En gran medida, a lo largo del libro se estudia la trayectoria de estas mujeres, en un principio, de manera conjunta y general, para luego pasar a un estudio particular de cada caso. En los estudios particulares se enfoca en mayor medida en los aportes de las mujeres escritoras de dicha época.
Primer capítulo:
En el primer capítulo se comienza el estudio generalizado de las escritoras. A manera de introducción, Cubillo utiliza este primer capítulo para establecer los parámetros de su estudio, entre los cuales, o, mejor dicho, a partir de los cuales, establece comparaciones que sirven para caracterizar a las ensayistas como un conjunto en sí.
Comienza por hablar sobre el papel de las mujeres en la literatura de principios del siglo XX (y finales del XIX). Aunque se enfoca en la labor literaria, también menciona el papel de ellas en el ámbito político y social de la Costa Rica de la época.
Al inicio del capítulo Cubillo aclara el panorama, explicando por qué es importante tener en cuenta la ausencia de las mujeres escritoras en historias de la literatura costarricense. Algo que, según el texto, es bien sabido por muchos. Pero también hace hincapié en que, no sólo se ignora, hasta cierto punto, la labor literaria de las mujeres, sino que, cuando se mencionan, también se hace de manera selectiva en cuanto a los géneros literarios en los que incursionan. Cubillo recuerda el hecho de que durante muchos años, se consideraba que géneros como la novela no eran aptos para las mujeres y, en cambio, la lírica, por estar tan relacionada con los sentimientos, sí lo era.
Por lo tanto, es de gran importancia para la investigadora que se tome en cuenta la gran labor ensayística de estas mujeres, que, en realidad, transgredieron muchos límites impuestos a las mujeres por la sociedad y tuvieron un gran impacto cultural en el país.
Gran parte del interés de Cubillo es, precisamente, formar una especie de biografía colectiva, aunque admite que estas escritoras tienen muchas diferencias entre sí, siendo pocos los aspectos que las relacionan unas a otras. En muchos casos tuvieron intereses y enfocaron sus luchas en ámbitos y objetivos distintos. Por ejemplo, Carmen Lyra dedicó la mayor parte de su energía al Partido Comunista y, por tanto, a la defensa de los derechos de los trabajadores, no así a los derechos de las mujeres. Mientras que otras escritoras incluidas aquí sí dedicaron parte de su vida a las luchas feministas.
A pesar de que cada una de ellas siguió su propio camino, buscando sus propios objetivos, siguen teniendo algunos aspectos compartidos. Por ejemplo, Cubillo las agrupa en cuanto escritoras que se interesan en los derechos de la niñez y que también tuvieron relación con el magisterio.
Segundo capítulo:
El segundo capítulo se dedica a estudiar a Ángela Acuña y su trabajo con respecto a la educación sexual de los niños y niñas. La investigadora hace un recorrido por esta publicación de Acuña, explicando sus objetivos y posibles aportes, sin ignorar las opiniones que, leídas desde la perspectiva actual, pueden resultar incluso chocantes en algunos casos. La obra “El Misterio sexual” se dedica a dar consejos (más que todo lineamientos) sobre la manera de educar a los niños y niñas desde el hogar. En el estudio se hace un resumen de las principales recomendaciones que da la escritora, demostrando sus opiniones al respecto de roles de género, y sexualidad. Es relativamente fácil encontrar matices bastante conservadores en el discurso de Acuña, pues sus lineamientos miden el comportamiento ideal de una mujer según su moral, su obediencia y su dedicación a la educación de los hijos. Hay una fuerte presencia de los roles de género que en la actualidad se han tratado (y se siguen tratando) de eliminar. Incluso, Acuña se refiere a la homosexualidad como algo negativo que se debe tratar con paciencia y con compasión. Con respecto a la sexualidad, es notoria la intención de mantener la pureza de los niños y de las mujeres. Aunque también menciona la importancia, según su ideal, de controlar la sexualidad de los niños, en lo que incluye el hábito de la masturbación como algo nefasto (y prácticamente exclusivo de los varones).
Al estudiar su trabajo, a través del análisis de Cubillo, quedan claras las ideas conservadoras de Acuña. Sin embargo, la investigadora rescata que, a pesar de esto, Acuña aportó en gran medida al feminismo y el papel de las mujeres en la cultura a través de la ruptura de algunos ideales para la mujer, como el hecho de incursionar en la vida académica ella misma y luchar para obtener su lugar en el ámbito profesional, también, su mención de la igualdad de derechos para ambos géneros, algo que resultaba transgresor para la época. Además, menciona que Acuña también se podría haber visto restringida por su posición como una mujer de la alta sociedad, que se relacionaba con ciertas personas. Acuña debía actuar de cierta forma por su posición social y esto impedía que rompiera con algunos esquemas que podían resultar aún más transgresores. Finalmente, cabe mencionar la importancia que Cubillo le da siempre a evitar realizar análisis anacrónicos de un discurso. Nuevamente, es importante tomar en cuenta que cada quien es producto de su propia época.
Tercer capítulo:
Este capítulo se dedica a estudiar a Carmen Lyra, cuya labor ensayística estuvo principalmente dirigida a la política, a la defensa y militancia del Partido Comunista.
Cubillo menciona que, a pesar de que la vida de esta escritora giró muy entorno a la política, sin prestar especial atención a las luchas feministas, también le parece importante estudiarla desde el punto de vista de que Carmen Lyra seguía siendo una mujer con una vida llena de decisiones que transgredían el ideal femenino de la época (era soltera, sin hijos y económicamente independiente), y que por eso tuvo que sortear diversas dificultades, además de recibir las incesables críticas de la sociedad por su forma de vida.
Según el estudio que realiza Ruth Cubillo de la obra de María Isabel Carvajal, no es la obra literaria de esta escritora lo que la coloca como parte de los avances en los derechos de las mujeres, sino el ejemplo y modelo que planteó para las mujeres que vinieron después. Carmen Lyra fue una líder en la política costarricense aún en una época en que las mujeres no eran consideradas ciudadanas y, por ende, no podían ejercer el derecho al voto ni la participación en cuestiones políticas. Esto ayudó a abrir el camino a las posibilidades de las mujeres en el mundo político.
Además, con respecto a esta escritora, Cubillo menciona particularmente el hecho de que se ignoren los textos académicos o de corte más político y social en la obra de las escritoras costarricenses. En este caso, como lo dice directamente,
en la historiografía literaria costarricense se presenta a Carmen Lyra, principalmente, como la autora de una colección de relatos infantiles titulada Los cuentos de mi tía Panchita [...] y con ello se borra, o al menos se nubla bastante, esta otra dimensión de la autora que estudiamos, es decir, la de una escritora inquietante por su clara postura ideológica. (Cubillo, 2011, p. 70)
Cuarto capítulo:
El cuarto capítulo se dedica a estudiar a Luisa González. A esta autora, Cubillo la estudia con respecto a su labor como educadora y también su activa participación en la política. Al igual que Carmen Lyra, González participó del Partido Comunista, esto mientras ejercía como docente y directora en la Escuela Omar Dengo, labor que le consiguió el título de “maestra comunista”, por su fuerte y marcada ideología. A la vez, fue esto lo que ocasionó que fuera despedida de tal cargo, sin ser un secreto las razones por las que fue destituida.
Cubillo la analiza con respecto a estos aspectos, y los reúne en un “binomio” que termina por formar el aspecto más notorio de la personalidad y los objetivos de Luisa González. En el caso de esta autora, es aún más notorio su interés en la educación de los niños, pero también su preocupación por las condiciones en que estos viven y estudian. También resultó importante de destacar en el estudio de Ruth Cubillo, la relevancia que tienen las luchas políticas de Luisa González y la vigencia que tienen aún en la actualidad, para lo cual compara los esfuerzos de González por defender la soberanía del país, con los esfuerzos de muchos por detener el Tratado de Libre Comercio en el 2007.
Quinto capítulo:
Está dedicado a Emilia Prieto. De ella se estudia en mayor medida la relación que tiene lo político con todo lo demás en la obra y perspectiva de esta autora. En este caso, la presencia de un texto en particular de la autoría de la mujer en cuestión es mayoritaria y se nota incluso desde el título del capítulo: “Ser apolítico es como ser nonato, difunto u orate” Emilia Pietro Tugores y su noción de política. En este capítulo se detiene a analizar el texto con mayor detalle, pues, es en él, en el que Pietro deja más clara su noción de política y la relación que tiene esta con todos los otros aspectos de la vida.
Sexto capítulo:
Habla sobre Emma Gamboa, principalmente sobre su labor en el ámbito educativo. Cubillo da a conocer los esfuerzos de esta escritora en temas como innovación y experimentación en la educación, algo que resultó en la fundación de la Escuela Nueva Laboratorio, dedicada precisamente a innovar en las estrategias educativas del país. Con respecto a esto, Emma Gamboa defendía una posición contraria a Emilia Prieto en cuanto a la presencia de lo político en la vida de las personas o relación individuo/política. Para Gamboa, la educación debía preparar a los niños a ser libres de pensamiento, a cuestionar sus entornos y circunstancias sin estar cegados por una posición política. Inclusive rechazó enlistarse en la izquierda costarricense pues, como le indicó a Joaquín García Monge, “no considera apropiado adoptar posturas ideológicas radicales o incondicionales” (Cubillo, 2011, p. 124).
Séptimo capítulo:
Finalmente, se refiere a Yolanda Oreamuno, sobre la cual, a diferencia de otras escritoras en el estudio, se extiende aún más en el análisis literario como tal de sus ensayos y también incluye algunos relatos. Generalmente analiza su obra con respecto a temas particulares presentes en ella, tales como su relación con ciertas “otredades” como el campesino chileno, el campesino guanacasteco y el negro, para lo cual recurre a los planteamientos de Sigmund Freud respecto al miedo a relacionarse con el otro. En cuanto a estas premisas teóricas, al principio del capítulo indica que hará el estudio basándose en la afirmación de Lilia Ramos respecto a la angustia como leit-motiv de la obra literaria de Yolanda Oreamuno y que ha tomado parcialmente su recomendación de estudiarla desde el psicoanálisis y el existencialismo. También toma en cuenta las premisas teóricas de Sigmund Freud en cuanto a la cultura y la formación del sujeto a partir de esta.
En cuanto a detalles históricos y sobre su vida como tal, Cubillo no se extiende tanto, algo que hace deliberadamente y lo afirma de forma directa en el texto. Solamente se mencionan cuando estos detalles tienen alguna relevancia dentro de lo escrito por Oreamuno, por ejemplo, cuando se refiere a los chilenos, al sentido de pertenencia cuando se encontraba en México, entre otros. Según el análisis de Cubillo, Yolanda Oreamuno representa un sujeto sumamente marcado por la cultura, por la sensación de soledad, por las relaciones de un sujeto con “el otro” y la ineludible dependencia de afectos ajenos.
Posición del estudio con respecto a posibles debates
En general, este estudio es bastante directo con respecto al objetivo de la investigadora. Ruth Cubillo hace un esfuerzo por dar a conocer las obras ensayísticas de las escritoras costarricenses de principios del siglo XX, analizarlas, explicarlas y representarlas en un solo estudio, de forma que este funcione como un portal general para visualizar su labor literaria en el país en ámbitos que tradicionalmente se han reservado para los hombres.
Más que defender una posición con respecto a determinado debate, Cubillo pone a las mujeres ensayistas costarricenses, de principios del siglo XX, a dialogar desde sus propios contextos y sus propias luchas, para que, a pesar de todas sus diferencias, se genere un espacio que puedan compartir como parte de un conjunto en sí.
Hay un esfuerzo por reunir las labores ensayísticas de estas escritoras a partir de ciertas similitudes que permiten incluirlas en dicho conjunto, siendo la más importante de estas semejanzas, el hecho de ser mujeres y, a partir de ahí, que hayan tenido que lidiar con las mismas dificultades al incursionar en ámbitos mayormente dominados por hombres. Pero, además de este punto, Cubillo toma en cuenta dos ámbitos principales en los que incursionaron la mayoría de mujeres que estudia: “Los dos nexos más relevantes que encontramos entre las mujeres incluidas en este estudio son la política y el magisterio” (Cubillo, 2011, p. 10). Todo esto con el fin de generar un espacio concreto para este tipo de obras en la historiografía literaria costarricense.
Se puede decir, sin embargo, que la labor que realiza la investigadora se inserta en una discusión implícita sobre el papel de las escritoras costarricenses del siglo XX y finales del XIX, en cuanto a que, durante mucho tiempo, la historia literaria costarricense ha obviado las obras académicas de mujeres escritoras. Y, por otro lado, cuando no se ignora por completo la obra literaria de alguna de ellas, como mínimo se les reduce a ciertos géneros literarios, de manera que se toman en cuenta sólo sus textos líricos, por ejemplo, y se dejan por fuera sus aportes en ámbitos como el académico, el político y social. Esto lo resume muy claramente María Amoretti en la introducción al mismo libro:
“este libro viene a colmar el vacío que la historiografía literaria de Costa Rica ha dejado al omitir la enorme y significativa presencia del ensayo femenino, haciéndonos creer que el ensayo es una forma literaria masculina y que en Costa Rica el grueso de nuestras escritoras se inclinaron por la lírica con unas cuantas excepcionales narradoras”. (en Cubillo, 2011).
De este modo, Cubillo se posiciona como defensora de la posibilidad de incluir a la ensayística femenina costarricense en dicha historiografía literaria. Además, en la misma introducción que escribe Amoretti se da relevancia, de igual forma, no solo a la recopilación de las obras en cuestión, sino también al criterio de selección de estas escritoras y luego de sus textos para luego estudiarlos en concreto. Según Amoretti, esta selección específica ya expresa, por sí misma, una tesis. Sobre la escogencia de los datos, esto se abordará más adelante con más detalle.
Otro punto interesante es la forma en que se aproxima Ruth Cubillo a ciertas escritoras. Por ejemplo, en el caso de Luisa González, que toma como base algunos presupuestos teóricos amparados por la sociocrítica con respecto a la presencia de la ideología en un sujeto determinado y la necesidad de estudiar este aspecto directamente y no como un elemento de fondo. También toma en cuenta la definición de un sujeto a partir de normas sociales y de cuánto este sujeto las respete. La manera en que introduce a Luisa González con apoyo de estas premisas, deja ver su decisión de estudiar a las escritoras desde un punto de vista nuevo, diferente a lo que tradicionalmente se ha trabajado sobre ellas.
También en el caso de Yolanda Oreamuno es posible ver cómo Cubillo se coloca en una tendencia específica para estudiar a la escritora, al tomar (aunque sea sólo parcialmente) las recomendaciones de Lilia Ramos respecto a estudiarla desde el existencialismo, con Sören Kierkeegard, y el psicoanálisis, con Sigmund Freud.
Ahora bien, es interesante que, aunque Ruth Cubillo se coloca de un lado de este debate implícito con la historiografía literaria costarricense tradicional, también hay que tomar en cuenta que lo que se hace es, en realidad, otra escogencia, con el mismo nivel de objetividad/subjetividad. En este caso la investigadora decide prestar atención a la obra ensayística y no a los textos literarios pertenecientes a géneros como la novela y la lírica.
Respecto a esto último, Roland Barthes en su obra Crítica y verdad, cuestiona la objetividad como factor determinante de la historia como género, pues, según su argumentos, las evidencias que se encuentren en los textos históricos están ahí luego de hacer ciertas selecciones. Así que, como considera Barthes, en realidad, cada historiador, cada investigador toma ciertas decisiones que lo llevan a incluir ciertos datos en sus investigaciones y luego aplicar ciertos códigos (de su elección) para el estudio de estos. En este caso, es cierto que las escogencias se han visto sumamente influidas por el contexto social del país. La mayoría de las historias literarias costarricenses han obviado este tipo de obras gracias a la dominancia de los modelos patriarcales y la tradición de literatura masculina en ciertos géneros. Y, ante esta realidad, Cubillo ha elegido tomar el camino opuesto, y ha decidido dejar por fuera la obra lírica y narrativa en la mayoría de los casos, para reafirmar el cambio que propone.
Esto no quiere decir, sin embargo, que el trabajo de Cubillo deba ser descartado, sino todo lo contrario: es sumamente relevante el hecho de que se realice una escogencia de textos diferente a la que se ha hecho una y otra vez en la historia literaria del país con respecto a sus escritoras. El esfuerzo de Cubillo por reunir las obras ensayísticas de mujeres de principios del siglo XX es de admirar e, incluso, de agradecer. Los aportes culturales que estas mujeres realizaron a Costa Rica fueron, en realidad, mucho más impactantes y relevantes de lo que se les ha reconocido durante mucho tiempo. Es, por tanto, un trabajo que venía siendo necesario desde hacía muchos años y Ruth Cubillo se tomó el trabajo de hacerlo. Por lo tanto, no se trata de presentar los datos correctos o completos, sino de hacer las escogencias que hasta el momento no se han hecho, de manera que al final, no queden datos sin mencionar ni reconocimientos sin otorgar.
Procedimientos metodológicos usados en el estudio
Ruth Cubillo demuestra, en su estudio, haber realizado una búsqueda exhaustiva de las obras de las escritoras en cuestión. En un principio se nota su labor en el hecho de que, como ella misma lo afirma, la mayoría de las historias de la literatura de Costa Rica han obviado la obra ensayística de las escritoras del país. De manera que, al mencionar, desde el primer capítulo del texto, la exacta cantidad de ensayos producidos por cada una de ellas, ya demuestra un conocimiento claro del tema. Además, también demuestra un buen manejo de la obra más conocida de las escritoras, conocimiento que utiliza en ciertas ocasiones como una especie de contraste y ejemplificación de la percepción de estas mujeres.
Con respecto a la búsqueda exhaustiva de fuentes, también hace esto en el tema histórico como tal. Cubillo demuestra y utiliza a lo largo de todo el texto, un buen conocimiento de la historia política de la Costa Rica del siglo XX, el cual sirve como base para probar varios puntos y para caracterizar a cada escritora según su contexto histórico y social. Esto se nota especialmente en el caso de Carmen Lyra, pues la política constituyó un gran (y el principal) aspecto de su vida, por lo que, para lograr entender sus acciones y sus convicciones, es necesario también tener un entendimiento del contexto político de la época, en el cual, la misma escritora fundó el Partido Comunista, y al cual también dedicó gran parte de su obra literaria (ensayística).
Cabe mencionar, con respecto a las fuentes, que estas son referenciadas al final de cada capítulo y en las notas al pie de página, dejando más que claro que hubo un gran trabajo de investigación antes de escribir el estudio como tal.
Cubillo también acude a la historiografía literaria costarricense en varias ocasiones, con el objetivo de sentar las bases para generar un contexto para el estudio de la obra de cada escritora. En este caso no se trata sólo de una lectura exhaustiva de las fuentes, sino también de un análisis de estas: de los criterios de selección, del contexto histórico en que se realiza cada historia literaria y que influye en las escogencias de cada una y, posteriormente, una comparación de estas fuentes con el pensamiento actual, para generar un estudio moderno, aunque no anacrónico, de las escritoras en cuestión.
Por otra parte, para estudiar a cada una de las escritoras, Cubillo realiza un análisis literario de textos específicos que toma como representación de la obra ensayística de estas mujeres. Dicho análisis se presenta, en muchas ocasiones, de manera general, no específica. Es decir, que el análisis de cada texto no se reproduce por completo en el libro de Cubillo, sino que se referencia, en algunos casos de manera más superficial que en otros. Este análisis se nota en la forma en que Cubillo se refiere a la obra de las escritoras y el contexto en que fueron escritas. Sí es cierto que en muchos casos no se detiene a explicar la obra literaria en particular de las escritoras, sino que, como ella misma lo afirma, dedica el estudio a generar una biografía, no un análisis literario de los ensayos de las escritoras. De esta forma, se sobreentiende el conocimiento que tiene de las obras, tanto en forma de lectura como de estudio de ellas. En algunos casos, como el de Ángela Acuña, Luisa González y Yolanda Oreamuno, sí se mencionan con detenimiento algunos puntos expresados en ciertos textos en particular; y en el caso de Emilia Pietro sí se dedica más de lleno al ensayo particular que generó el interés en la investigadora (evidente desde el título mismo del capítulo), pero en otros, la mención es mínima, pues se enfoca más en la vida y contexto de las escritoras.
Además, de la búsqueda y lectura de fuentes y del análisis de la obra de las autoras, Cubillo realiza un trabajo comparativo entre ellas y la situación social de cada una. Esta comparación, más que para distinguir a cada autora, sirve como una herramienta para incluirlas a todas en este conjunto al que denomina mujeres intelectuales de vanguardia de la primera mitad del siglo XX en Costa Rica. Es a partir de este que ha podido reunirlas respecto a su labor educativa y política, además de su participación, explícita o implícita en luchas feministas del siglo XX. El libro también tiene el objetivo de poner a dialogar a estas escritoras, unas con otras, con respecto a los temas en común que han considerado en su obra literaria y en sus acciones para la sociedad costarricense. Por ejemplo, el caso de Emma Gamboa y Emilia Prieto con respecto a su punto de vista sobre la relación individuo/política. En estos casos, es más notorio el análisis comparativo que ha hecho Cubillo de las obras. Se identifican elementos y temas en común, para luego analizar las perspectivas desde las que cada una aborda el asunto, agregando así, un valor más al estudio, pues permite aproximarse y reconocer las diversas formas de tratar un mismo problema, presentes en este conjunto de mujeres modernas del siglo XX.
En general, el estudio se dedica a reunir las principales obras ensayísticas, académicas, de estas escritoras, por lo que la metodología se relaciona, principalmente, con la investigación, análisis y luego selección de datos bajo ciertos criterios.
Sí es necesario mencionar que la recopilación y transcripción de datos es mayoritaria, dejando poco lugar a plasmar el análisis realizado de las obras ensayísticas de estas escritoras y de textos en particular con más profundidad. No hay que olvidar, claro, que el libro es bastante breve, por lo que la información tiene un espacio reducido para presentarse y analizarse. Por ejemplo, en el caso de Carmen Lyra, se muestra más interés en la biografía de la escritora, en el ambiente político de la época y su relación con la vida de ella, y se habla poco de la obra literaria en particular (a pesar de mostrar un justo conocimiento de su obra ensayística). Es cierto que el contexto, en este caso, es de gran importancia por las circunstancias bajo las cuales Carvajal escribió su obra de corte ideológico y político, pero es posible que extenderse un poco más con respecto al análisis literario de su obra, hubiese aportado aún más a los argumentos de Cubillo.
Sin embargo, esto no se ve por completo como un punto negativo, sino como una reafirmación del objetivo del estudio, que es crear una biografía colectiva de las mujeres de vanguardia del siglo XX en Costa Rica, como la investigadora las ha denominado. Como obra historiográfica, por tanto, realiza un muy buen trabajo recopilando y presentando los datos que ha elegido incluir, además de unirlos en un solo conjunto relevante para la historia literaria del país. Simplemente es probable que una explicación más detallada del análisis literario hubiese aportado en mayor medida al estudio.
Principales aciertos, limitaciones o lagunas
Con respecto a los puntos positivos o aciertos del trabajo de Ruth Cubillo, en primer lugar, el hecho de tratar con verdadera franqueza los trabajos de estas escritoras, es un gran acierto del estudio. La investigación, a la que Amoretti en su introducción caracteriza como un trabajo feminista en un sentido muy filosófico y espistemológico, es muy capaz de ser leído como un ensayo sobrio, ordenado, objetivo y sutil, que le da la relevancia que se le debe a estas escritoras desde hace muchos años, sin sentirse como un trabajo subjetivo e innecesariamente apasionado (en un nivel que puede ser contraproducente).
Por el contrario, la investigación de Ruth Cubillo expresa sus argumentos tanto como expresa los contraargumentos que corresponden. Mientras demuestra los claros e innegables aportes de la obra de estas escritoras, también, justo al lado de ellos, demuestra sus carencias o retrocesos, sin que esto implique una posibilidad de refutar por completo o descartar el trabajo realizado. Sino que funcionan a manera de base para entender mejor la posición de cada una de estas mujeres en su época y su espacio físico, político y socioeconómico. Fuera de jugar como puntos negativos y nada más, las limitaciones de los discursos de dichas escritoras, vistas desde una perspectiva actual, permiten entender mejor cómo actuaron estas mujeres, qué herramientas tuvieron y cómo las usaron y hasta dónde pudieron llegar a partir de esto, lo cual juega como una estrategia que le otorga aún más valor a sus labores.
Por ejemplo, en el caso de Ángela Acuña, a pesar de que su discurso es sumamente conservador, y está lleno de estereotipos que actualmente no son aceptados como antes, Cubillo logra explicar estas limitaciones al estudiar el contexto social de Acuña. Con esto, el lector sería capaz de comprender que la escritora y abogada, más que representar un retroceso para las luchas feministas hasta cierto punto, demuestra cómo una mujer en su posición tuvo que elegir sus batallas con cuidado. Además, cómo utilizó, de forma muy astuta, su contexto y los discursos patriarcales de la época para colocarse en una posición de respeto que, en última instancia, le permitió demostrarle a la sociedad costarricense que una mujer puede ocupar puestos en el campo jurídico, convirtiéndose en la primera abogada del país y abriéndole paso a las demás mujeres en el ámbito laboral. Esto le dio la oportunidad a otras mujeres para luchar, ahora con más autoridad, por los derechos y la libertad que merecemos, desde posiciones que ofrecen más oportunidades, y que permiten generar un cambio a mayores escalas.
Por lo tanto, la manera en que Cubillo hace un balance entre los aciertos y desaciertos de los discursos y las labores de cada escritora juega más a favor que en contra y logra plantear y demostrar su punto muy claramente y con más fuerza.
En segundo lugar, la claridad con que presenta los datos históricos y literarios representa también una ventaja para el estudio. Este es un libro que puede ser leído con mucha fluidez y relativa facilidad. Para alguien versado en el tema, es una lectura amena que vuelve al estudio algo relativamente ligero y sencillo de procesar. Y para alguien no tan versado en el ámbito, puede resultar como una forma de acercarse a escritoras que, en algunos casos son conocidas por sus obras literarias pero no por su labor política y social, como Carmen Lyra, o incluso conocer desde cero a otras escritoras que no son tan conocidas por la población en general.
Esta claridad en el discurso de Ruth Cubillo y la manera de presentar parte de la historia literaria costarricense, puede jugar a favor en el sentido de que sería más probable que más personas lo lean y la escogencia de datos y autoras para agregar en la historia literaria del país que realiza Cubillo, tenga mayores probabilidades de establecerse como una norma, en un contexto que tradicionalmente ha tenido otra forma de proceder.
Con respecto a las limitaciones del trabajo, quizá el único factor que podría representar una limitación es el hecho de introducir sólo superficial o ligeramente las obras literarias de algunas de estas escritoras. En algunos casos sí hay un análisis relativamente profundo, detallado, o específico presente en el libro, pero en otros la obra ensayística en sí se menciona brevemente. Es cierto que el estudio es un trabajo historiográfico, representa un esfuerzo por recopilar y mostrar ordenadamente datos sobre estas escritoras agrupadas, en particular, por sus circunstancias. Sin embargo, podría ser favorable para este estudio detenerse un poco más en demostrar algunos puntos directamente de la obra ensayística, de algunos o del principal ensayo escrito por cada una, de manera que el lector se familiarice en mayor medida con la obra literaria en sí.
Sin embargo, es claro que el estudio es un trabajo histórico, más que un análisis literario, y el objetivo que se propone Cubillo desde el principio explícitamente, que es producir una biografía colectiva, se logra muy bien. La investigadora presenta los datos necesarios para conocer la vida y circunstancias de estas escritoras que las llevaron a aportar de la manera en que lo hicieron a la sociedad costarricense de su época y de mucho más adelante también.
De hecho, Cubillo realiza también un buen trabajo en comparar los aportes culturales de estas escritoras con la actualidad, logrando insertar las luchas y los aciertos de ellas en la vida de las mujeres y la sociedad en general del presente, demostrando que, en algunos casos, sus ideas incluso se pueden traer y aplicar al presente y siguen estando muy vigentes.
Posibles temas de investigación que se podrían emprender a partir de los aportes y limitaciones de la obra
Este estudio representa una gran oportunidad para otros investigadores o investigadoras que se interesen en emprender estudios comparativos entre escritoras costarricenses del siglo XX. En general, todos los datos incluídos en el estudio, toda la información que se da sobre estas escritoras, y el análisis que realiza Ruth Cubillo de cada obra ensayística, son capaces de sentar las bases para una buena cantidad de temas qué estudiar desde las perspectivas de cada una de estas intelectuales. Muchas de ellas tocan asuntos similares, situaciones y acontecimientos en particular que se abordan desde diversos pensamientos, lo que resulta en un campo abierto para estudios comparativos de todo tipo.
El hecho de que Ruth Cubillo se tomara el trabajo de incluir a estas escritoras específicas en un grupo concreto según sus similitudes, permite considerarlas como un objeto de estudio conjunto en el que se pueden emprender análisis comparativos de sus obras con respecto a temas en común, como la educación, la sexualidad y la política y, a la vez, temas que generan discordancia entre algunas de ellas. Por esta razón, la literatura comparada es un campo que se beneficia en gran medida de este estudio en particular.
Como ejemplo de un posible análisis comparativo se podría considerar tomar la obra de Luisa González y la de Ángela Acuña y estudiarlas con respecto a su interés en la educación de los niños y niñas, especialmente en el hogar. En este caso se podría tomar en cuenta la diferencia de situaciones socioeconómicas en las que se encontraron ambas escritoras.
En el caso de Acuña, desde una posición privilegiada y en el de González, la de una mujer de escasos recursos. Además, se le puede dar relevancia a los entornos en los que se desenvolvió cada una. Por ejemplo, Luisa González, según Cubillo en su estudio, visitó las casas de algunos de sus alumnos en mayor necesidad, para darse cuenta de las dificultades que algunos de los niños debían sortear para seguir en la escuela. Además, tenía pleno conocimiento de la situación en las bananeras y las condiciones en que vivían los obreros y sus hijos. Por otra parte, Acuña se desenvolvió en un ambiente más enfocado en lo profesional, y con relativamente menos dificultades económicas, lo que la llevó a concentrarse en luchas sociales que tenían que ver con la admisión en ese contexto y la apertura del camino al ámbito laboral y académico para las mujeres. Abordó, por tanto, la maternidad, la sexualidad y la educación de los niños y niñas de un modo diferente, sin detenerse tanto como González en temas relacionados con los recursos económicos. De modo que, aunque ambas se interesaron en la educación de niños y niñas, cada una lo pudo haber hecho desde un punto de vista distinto y con respecto a temas diferentes.
Con respecto a Luisa González, también sería interesante y relevante hacer un estudio comparativo directamente entre su obra ensayística y su labor social; y la obra literaria de Carlos Luis Fallas, acerca del imperialismo yanqui, como es abordado en ambas obras literarias y, más específicamente, sobre la situación en la United Fruit Company. Podría ser interesante cómo el tema es abordado desde un texto literario, como lo es Mamita Yunai y luego tomar en cuenta la labor de Luisa González como ensayista y educadora comunista. Además, se pueden considerar los factores sociales y de género involucrados en las dos perspectivas en cuestión.
También es interesante lo que Emilia Prieto pensaba y escribió sobre la política y la participación de las mujeres en ese ámbito. Un tema de investigación que podría resultar de este tema, es traer al presente esa percepción de Emilia Prieto sobre la mujer y su capacidad y derecho de participar en temas políticos, para luego compararla con la situación como se encuentra actualmente, en el siglo XXI, cuando incluso ya hemos tenido una presidenta que, a pesar de su posición como primera mujer electa presidenta de la República, durante y después de su gobierno ha recibido incesantes críticas sobre su desempeño, siendo la principal, el hecho de supuestamente ser manipulada por los hombres de su partido. De lo que formó parte inclusive la propaganda en televisión durante la campaña electoral en la que se retrataba a Chinchilla como un mero títere de los líderes (masculinos) del partido.
El análisis que realiza Cubillo con respecto a esta autora permite darse cuenta de las muchas oportunidades para estudiar su labor ensayística y teórica. El hecho de que mencione la presencia de concepciones que se acercan a las de Bajtín y de Barthes, plantea ya un tema de interés que puede ser aprovechado en el campo de la investigación literaria como tal. Cubillo no hace más que sembrar un interés en esta autora sobre la cual, es interesante la reducida cantidad de estudios específicos y detallados.
Algo muy importante de considerar en este caso, es que la misma Ruth Cubillo menciona en su libro un posible tema de estudio sobre Emilia Prieto Tugores:
“[...]sería muy pertinente analizar la producción xilográfica de Prieto Tugores a la luz de su concepciones políticas, ya que en el desarrollo de esta faceta la autora también se muestra sumamente crítica con esos aspectos de la sociedad costarricense que en su opinión era necesario cambiar. Hay aquí una diferencia con respecto a la producción ensayística: el mensaje presente en los grabados podía llegar a un público más amplio, pues no era necesario saber leer para poder recibirlo” (Cubillo, 2011, p. 111).
Recomienda el tema y luego indica que este estudio queda pendiente para ser abordado multidisciplinariamente. Por lo tanto, parece importante tomar en cuenta también cómo la investigadora está consciente de hasta dónde llega su estudio y de las posibilidades que abre para otros investigadores, no sólo literarios o historicistas, sino también dentro de otras áreas que se puedan relacionar con el asunto.
Sobre otras autoras, como Oreamuno y Carmen Lyra, hay muchos estudios literarios y sobre sus labores, por lo que resulta un poco más complicado encontrar asuntos que se hayan dejado por fuera, más que tomar su obra y realizar una lectura desde perspectivas nuevas a partir de lo que un estudio como el de Ruth Cubillo da a conocer y plantea a su manera.
Razones por las que se recomienda la lectura del libro Mujeres ensayistas e intelectualidad de vanguardia en la Costa Rica de la primera mitad del siglo XX
En general, el libro está escrito de manera muy clara y directa, lo que hace su lectura muy amena y fluida. Esta es una de las principales razones por las que se recomienda el libro. Como se mencionó anteriormente, es una lectura que puede resultar agradable y transparente tanto para versados en el tema como para otro tipo de audiencia que decida acercarse a la literatura costarricense con una mente abierta y preparada para recibir información y datos históricos que, hasta el momento, en muchos casos han sido obviados o minimizados de alguna manera. Su facilidad de lectura y amigabilidad con las posibles audiencias juega a su favor en el sentido de que da más oportunidad a las mujeres que estudia de ser conocidas por más personas, por su labor ensayística y sus aportes sociopolíticos al país.
Como investigación tiene una gran relevancia para la historia de Costa Rica, tanto literaria como política. Cubillo se encarga de llamar la atención acerca del papel tan importante que tuvieron muchas mujeres en el desarrollo del país durante el siglo XX y, por supuesto, de lo que esto significó respecto a los derechos de las mujeres y sus oportunidades de participación; para los avances en materia de educación y derechos de la niñez, sexualidad, roles de género y otras luchas sociales de igual relevancia, tales como la defensa de los trabajadores y la población general. El estudio de Cubillo logra posicionar a estas mujeres como activas piezas del cambio nacional y del desarrollo y progreso del país, un reconocimiento que no se les da casi nunca y que muchos, ni siquiera consideran necesario porque no tienen conocimiento de sus labores ni de su relación con el tema.
Por otra parte, es importante mencionar la concepción de Cubillo de estas autoras y sus obras como “modernas”. Esto genera un acercamiento mayor a las escritoras desde una perspectiva actual. Trae a nuestra realidad los aportes de estas mujeres, renovando su relevancia y reconociendo la importancia de lo que hicieron y siguen haciendo, en cierto sentido, por la sociedad costarricense. Es claro que las luchas por los derechos de las mujeres aún no se terminan, pero tener presentes a estas escritoras y sus realidades particulares, dentro de contextos tan complicados, genera más seguridad en estas luchas y funciona como fundamento para saber que es posible un cambio, que ya se han dado muchos y que ya se han comenzado otros. Además de que es posible ver en sus ejemplos, cómo estos cambios llevan cierto proceso, aunque lento, pero que esto no quiere decir que no haya ningún avance.
Finalmente, otro punto positivo, desde la perspectiva de este análisis en particular, es la manera en que Cubillo expresa su discurso desde el inicio hasta el final del libro. Así como Amoretti lo menciona en la introducción al estudio, hay no sólo claridad y transparencia, sino también una sobriedad, mejor dicho, cierta elegancia en cómo Cubillo balancea la objetividad (hasta donde es posible tenerla en un estudio de este tipo) y las opiniones personales. Es claro que los pensamientos del autor o investigador siempre se van a “filtrar”, pero en este caso, lo hacen de una forma poco invasiva e incluso agradable. Algo que resulta muy evidente al referirse a la polémica entre Emma Gamboa y Emilia Prieto:
“ambas mujeres, en tanto que maestras cuyo principal objetivo era mejorar las condiciones de vida de la niñez costarricense, lucharon por alcanzar esa meta, pero cada una lo hizo desde lugares muy diferentes y partiendo de premisas muy distintas. Y aunque como investigadora es inevitable forjarse una opinión propia, al mejor estilo de doña Emma en este caso tampoco tomaré “partido”” (Cubillo, 2011, p. 132).
Finalmente, este análisis verdaderamente recomienda la lectura del estudio de Ruth Cubillo desde un punto de vista crítico, a la vez que se lo considera como un gran aporte a la historiografía literaria costarricense, realmente necesario de reconocer.
Bibliografía
- Barthes, R. (1972). Crítica y verdad. Siglo XXI, Buenos Aires.
- Cubillo, R. (2011). Mujeres ensayistas e intelectualidad de vanguardia en la Costa Rica de la primera mitad del siglo XX. EUCR
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Festival Centroamérica Cuenta. Recuperado el 6 de mayo del 2022 de https://www.centroamericacuenta.com/ruth-cubillo/
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Fecha del número
Jan-Jun 2023